Habitantes de las agencias de Puente Madera, Rancho Llano, Santa Rosa, Tierra Blanca, Monte Grande y personas de San Blas Atempa, marcharon este lunes 27 de julio, del Puente Madera sobre la carretera Panamericana, en defensa de El Pitayal y en contra del Parque Industrial del Corredor Interoceánico.
Toda vez que en el monte de El Pitayal se pretende realizar la instalación de uno de los 10 parques industriales que forman parte del Corredor Interoceánico.
Dijeron que un año ha transcurrido desde que, las y los comuneros de esta agencia, se enteraron de que se estaba contemplando la instalación de un Parque Industrial en el monte de El Pitayal, luego de que se realizó una falsa asamblea de comuneros convocada por Antonino Morales Toledo, que en ese entonces ostentaba el cargo de presidente municipal de San Blas Atempa.
En donde se avaló el despojo de sus tierras de Uso Común mediante el supuesto uso del mecanismo de Consulta Previa, Libre e Informada, proceso que se caracterizó por la violación de los principios de Buena Fe, Libre, Previa, Informada y Culturalmente Adecuada del mecanismo jurídico utilizado.
“Esa asamblea estuvo llena de irregularidades,por el acarreo, la falsificación de firmas de más del 80% comuneros y la firma de dos comuneros ya fallecidos; además se realizó acorde a los tiempos del mercado y no de la comunidad, pues en tan sólo cuatro horas durante dos días desahogaron toda la información y avalaron la industrialización de nuestras tierras colectivas” expresaron los pobladores.
Por lo que derivado del despojo y la violación a sus derechos como pueblo indígena, la comunidad binnizá de Puente Madera se mantiene y seguirá firme en resistencia en contra de la instalación de este parque industrial, al considerar que este megaproyecto ha ofertado sus tierras, manantiales, viento, bosques, selvas, mares, cerros y todo aquello que puedan comercializar al capital privado estadounidense y asiático.
“Llamamos a hombres y mujeres de esta región del Istmo de Tehuantepec a que levanten la voz en contra de la industrialización y entrega de nuestros territorios, que este megaproyecto implica. Es momento de decidir, o defendemos nuestros recursos y tierras de las cuales dependemos o permitimos la entrega de estas a manos privadas”, refieren.
Diana Méndez