Con la intención de cambiar a una sociedad más participativa y menos “quejosa” y “negativa” de la realidad social, el Arzobispo de Oaxaca José Luis Chávez Botello, exhortó a las organizaciones sociales y a los partidos políticos a cambiar de dinámica de acción y pasar de las críticas negativas, al reconocimiento de lo bueno existente en el entorno y presentar propuestas que generen el cambio en la sociedad oaxaqueña.
“Es un llamado a todos para que coadyuvemos, sin cerrar los ojos y dejar de señalar lo que está mal” dijo el jerarca católico, a la par que aseguró es necesario que los partidos y las organizaciones sean conscientes de que es necesario hacer propuestas para echar a andar lo que hace falta y no quedarse en la queja social.
Indicó que este 2012 será de suma relevancia que los partidos políticos presenten una nueva actitud, mas propositiva para el bien común y con menos intereses o beneficios del grupo político que solo satisfaga las necesidades de sus agremiados y agremiadas.
Así mismo Chávez Botello manifestó que será un año determinante para apoderarse de la herramienta que las redes sociales brindan para generar una sociedad activa y participativa, que sí señale los errores existentes, pero que también aliente la generación de propuestas y acciones para la posible solución de los males que aquejan a la entidad oaxaqueña.
“Oaxaca necesita una etapa de aliento, de estímulo, para que se realicen los cambios que tanto hemos esperado y que merecen las y los ciudadanos, sin dejar de señalar lo que no se hace bien, con el respectivo sustento y no a base de mentiras” expresó Chávez Botello.
Por otro lado y a ocho años de estar al frente de la arquidiócesis capitalina, Chávez Botello detalló que durante este tiempo, ha tenido la oportunidad de recorrer por seis ocasiones todas las comunidades y capillas que competen a su jurisdicción, en la cual se ha tenido que enfrentar a desafíos dentro de los que destacan los conflictos existentes entre pueblos y a la carencia de fe de muchos de estos.
“Son varios desafíos a los que nos hemos enfrentado, los de carácter social, de la propia orografía, la inercia de costumbres, situaciones históricas, que han debilitado la Iglesia y la vida cristiana” refirió el religioso.
Reconoció que uno de los desafíos a los que se enfrentan actualmente es el de la formación de calidad, tanto a nivel social como de la propia Iglesia; así como la división y falta de unidad entre la propia sociedad, que dificultan o han retardado el trabajo conjunto en una formación más solida en cuanto a la fe.
Por lo anterior destacó que este año la Iglesia católica que representa, tendrá como principal tarea trabajar con las familias oaxaqueñas, para que estas asuman su compromiso de educar no sólo hijas e hijos religiosos, sino buenas ciudadanas y ciudadanos que permitan el cambio social anhelado.
Mención aparte tuvo por parte del arzobispo la próxima visita de Papa Benedicto XVI, que pisará tierras aztecas, a iniciativa del máximo jerarca católico, el 23, 24 y 25 de marzo y donde asintió, estará presente la Diócesis oaxaqueña, que en breve definirá con qué tipo de acciones iniciará su preparación para recibir la visita más importante para el gremio católico.
Agencia JM
