Una vez que la comisión de trabajo y previsión social de la Cámara de Diputados ha aprobado con varios cambios y adiciones la iniciativa preferente del titular del Ejecutivo, mi voto será a favor de una reforma laboral que eleve la productividad de las empresas, la competitividad de México como país y sobre todo una reforma que respete y amplíe los derechos adquiridos de los trabajadores, comenzando por su derecho a la seguridad social y a un salario digno.
Se ha decretado un receso, después de jornadas intensas de debate al interior del grupo parlamentario del PRI y de mi partido con los demás grupos parlamentarios, en espera de que el dictamen sea pasado al pleno de la Cámara Baja, recinto de la soberanía de la nación.
Como un oaxaqueño comprometido con el desarrollo de la nación, y muy en particular por el despegue de mi estado y por las conquistas constitucionales de los trabajadores, mi voto será en congruencia con estas convicciones políticas e ideológicas.
El grupo parlamentario del PRI consiguió que se revisara a profundidad el proyecto del Ejecutivo, por lo que el dictamen ya es un producto consensuado que ha eliminado aquellas propuestas que ponían en riesgo el carácter social de la legislación laboral mexicana y que trastocaba la autonomía sindical.
Habrá más de 250 modificaciones a la Ley Federal del Trabajo y más de 130 adiciones, pero ninguna que contravenga la letra y el espíritu de la Constitución Política, un fruto social de la Revolución Mexicana.
Los legisladores del PRI buscamos que a México le vaya bien con la garantía de más empleos y mejores salarios, y por eso estamos construyendo las bases de un México mejor, al lado del próximo presidente de la República.
De manera específica logramos en la comisión del trabajo, y aprobaremos en el pleno, combinar el respeto a la libre asociación y el derecho de huelga, con la certeza jurídica para los inversionistas. Esta reforma actualizará nuestro régimen de relaciones laborales y regulará las nuevas formas de contratación laboral, reconocerá los derechos de los trabajadores del campo y de los trabajadores domésticos, modernizará el sistema de impartición de justicia laboral y pondrá al día el capítulo de violaciones a las normas de trabajo.
Mi voto en el pleno de la soberanía nacional será por México, por Oaxaca y por los trabajadores.
