Por el empoderamiento político de las San Pableñas Mariana Aragón/ Thella Román

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Capítulo II. San Pablo Huixtepec

A principios de año Petra Díaz Gaspar demandó al Presidente Municipal de San Pablo Huixtepec, ante el Tribunal Estatal Electoral de Oaxaca (TEEO), por la omisión de asignarle la regiduría correspondiente ante la renuncia del  regidor y suplente que le antecedían de acuerdo a la fórmula; sin embargo, en abril el Tribunal declaró infundada dicha demanda en virtud de que el propietario y suplente de la primera fórmula no presentaron su renuncia de manera formal ante el Instituto Electoral, aunque se facto si se pretendía ocupar dicha regiduría mediante una decisión unilateral.

Ahora sabemos que no fue un caso de violencia política, sin embargo, este fue el motivo que nos llevó a San Pablo el fin de semana pasado a hablar de los derechos políticos de las mujeres, de violencia política y de empoderamiento. El Presidente Municipal mostró interés y apertura desde la primera comunicación, y nos  brindó todas las facilidades necesarias para la realización del Taller,  sin embargo, también hay que decir que algunas de las asistentes cuestionaron  su interés por impulsar políticas públicas de género en el municipio, empezando por la propia  creación de la Instancia Municipal de la Mujer.

El grupo fue nutrido, participativo y heterogéneo. Sin importar edad u ocupación, se mostraron entusiastas y cómodas con la idea de participar más activamente en los asuntos de la comunidad, pues las jóvenes mujeres se enfrentan a dos problemáticas importantes: 1) Alta deserción escolar por embarazo adolescente; e 2) Inseguridad.

Entre las asistentes estuvieron tres regidoras y una suplente, la presidenta del DIF municipal con algunas de sus colaboradoras, estudiantes y amas de casa. Cuando les preguntamos ¿Cómo es la participación política de las mujeres san pableñas? Alguien respondió: “Es buena, aquí hay mujeres líderes que se interesan por los asuntos públicos”; a lo que una de las regidoras añadió: “Es verdad, sin embargo, estas líderes por lo general trabajan para los hombres, todavía no logramos unirnos las san pableñas con objetivos comunes. Para conmemorar el ocho de marzo, quisimos regalarles a nuestras paisanas algo más que una licuadora, así que organizamos un foro orientado a su empoderamiento, desafortunadamente aunque invitamos mujeres de san pablo y de los alrededores;  sólo asistieron 50 mujeres; entonces, ¿qué debemos hacer para motivar su participación?”

Estas respuestas nos permiten identificar que las inercias patriarcales persisten como una de las principales causas de la subordinación de las mujeres y de su discriminación, lo que históricamente nos ha negado la participación en los procesos de transformación social.

Cuántas veces hemos escuchado que las mujeres: “no están preparadas para gobernar”;  “deben quedarse en casa, a cuidar a los hijos”;  e incluso que “la sociedad no está preparada para tener gobernantes mujeres”. Estas frases misóginas son resultado de la discriminación y los estereotipos que se han enraizado en nuestra sociedad, sembrando la semilla de la violencia política que obstaculiza el ejercicio de los derechos políticos de las mujeres, de ahí la necesidad de construir alianzas entre las mujeres desde una posición política de género.

Afortunadamente, las regidoras san pableñas ya caminan en esta dirección,  de hecho ya han conformado una Red de Mujeres a la que llamaron “Sueños de Libertad”, en la que han sumado a regidoras de diez municipios aledaños. Aunque algunas hayan tenido que enfrentarse a la oposición de sus munícipes, ellas no se rinden, planean más actividades en favor de su comunidad y en particular de las san pableñas.

San Pablo Huixtepec nos sorprendió gratamente con las muestras de sororidad de las regidoras, que trabajan y luchan por servir a su comunidad, no sabemos cuánto tiempo les lleve concretar sus objetivos, empezando por la instauración de la Instancia de la Mujer, pero sabemos que lo lograrán y que su Red de Mujeres irá creciendo de manera natural y legítima.  Esperamos que se conviertan en un modelo para municipios vecinos, demostrando que las mujeres sí podemos trabajar unidas y apoyarnos por metas comunes.