La Policía de Bolivia halló “armamento” en un vehículo de la embajada de Estados Unidos en un poblado en el noreste del país, informó este martes el ministro de Gobierno, Carlos Romero, aunque la legación aclaró que son para uso de agentes bolivianos que resguardan sus instalaciones.
“Se encontraron tres escopetas marca Remington, calibre 12, un revólver Smith and Wesson calibre 38, 2.350 cartuchos calibre 38 en cinco cajas de revólver, 3 equipos de comunicación y una computadora”, afirmó el ministro Romero, en una conferencia de prensa en Trinidad, 600 km al noreste de La Paz.
El material fue encontrado esta madrugada en Trinidad “en una movilidad (vagoneta) de la embajada norteamericana”, aseguró la autoridad, lo que representa “un conjunto de irregularidades muy graves que se han podido verificar en un operativo” policial.
“Hablamos de una acción que pone en riesgo la seguridad del Estado de Bolivia, de una acción que pone en cuestionamiento el respeto a la institucionalidad y a la normativa del estado boliviano”, dijo Romero.
Tras conocer la denuncia, la embajada estadounidense explicó en un comunicado que las armas son usadas por policías bolivianos que resguardan sus oficinas, en el marco de “un acuerdo” con el gobierno de La Paz.
El material era trasladado por los mismos policías de Trinidad a Santa Cruz, en el este del país, agregó la legación.
La embajada explicó “que estos artículos estaban destinados a Santa Cruz (este), para su uso exclusivo por parte de la Policía Boliviana en nuestras instalaciones en esa ciudad” y que “el transporte de estos artículos fue realizado por la Policía boliviana”.
El Ministerio de Gobierno señaló en un comunicado que las armas se hallaron en “un vehículo marca Nissan Trail X, con placa diplomática 27-MI-30”, tras ser requisada “en la puerta de ingreso del cuartel de la Unidad Móvil Policial para Áreas Rurales (UMOPAR)”, una unidad antidrogas.
El ministro Romero solicitó al Ministerio Público “investigar rigurosamente, de manera urgente y prioritaria, por tratarse de un asunto de seguridad nacional”.
Entre tanto, la embajada indicó que “estará muy complacida en cooperar con las autoridades bolivianas para proveerles cualquier información que requieran para esta investigación”.
El incidente se produce dos semanas después de que el presidente izquierdista Evo Morales anunciara que “cerrará” la legación diplomática, si “sigue molestando” a su gobierno.
La Paz y Washington carecen de embajadores desde 2008, cuando Morales expulsó al diplomático norteamericano, acusándolo de apoyar una supuesta conspiración política de la derecha criolla.
Los dos países firmaron en noviembre pasado un acuerdo marco de cooperación política, policial, judicial, antidrogas y comercial, lo que debería dar paso al restablecimiento de embajadores.
Tanto Washington como La Paz han manifestado públicamente en los últimos meses sus intenciones de normalizar las relaciones diplomáticas, aunque el gobierno boliviano ha sostenido, casi de manera invariable, sus críticas a Washington en diferentes foros internacionales.
Estados Unidos, en un informe antinarcóticos difundido en marzo pasado, desaprobó los esfuerzos bolivianos para erradicar cultivos de coca, de los que aún hay 31.000 -según datos de las Naciones Unidas- mientras Bolivia tachó de político del reporte.
Agencias