La volatilidad actual ha reducido el margen de maniobra del Banco de México para evitar una mayor depreciación del peso, advierten analistas.
Incluso, varios de ellos ven la necesidad de un cambio en la política monetaria.
Ayer, el dólar cedió tres centavos respecto al día anterior y cerró al menudeo en 16.57 pesos. En lo que va del año, la moneda estadounidense se ha encarecido 25 por ciento.
Raúl Feliz, académico del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), aseguró que, hasta ahora, la política monetaria del banco central ha sido correcta.
Sin embargo, agregó, las decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), aunadas a las presiones sobre el peso, pueden provocar un problema inflacionario.
“Estamos llegando a un momento donde el espacio para jugar ese juego se está acabando.
“Hasta ahora, le han salido bien los cálculos al Banxico, pero, si la Fed sube o da una señal mañana (hoy) de que va a subir las tasas, las cosas van a empezar a cambiar”, indicó.
Los inversionistas esperan hoy con atención el anuncio de la política monetaria de la Reserva estadounidense, pues serán señales que definan si Estados Unidos eleva sus tasas en septiembre.
“Probablemente vamos a ver que Banxico suba las tasas en septiembre, pero quién sabe si el mercado lo va a obligar a hacerlo antes.
“Creo que será necesario aumentar el monto de la venta de reservas en el corto plazo para estabilizar un poco los mercados”, dijo Feliz.
El recurso utilizado por el Banxico para satisfacer la demanda de dólares se limita a subastar cada día 252 millones de dicha moneda.
Joel Martínez, director de la consultora Visor Financiero, cuestionó la lenta acción de las autoridades.
“Se debió haber subido la tasa de interés para estabilizar el mercado desde que (el tipo de cambio) estaba en el rango de 14.90 y 15 pesos.
“El diagnóstico me lleva a pensar que Hacienda y Banco de México tienen la intención de devaluar el peso”, expuso.
Detalló que, con una moneda depreciada, se puede reducir el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos, ya que se reciben más ingresos por la venta de petróleo. Con ello, se evita un recorte mayor del gasto.
Karthryn Rooney Vera, analista de estrategia macroeconómica de BullTick, aseveró que el Banxico debería incrementar sus medidas de intervención, pues resultan mínimas respecto a la depreciación del peso.
reforma.com