En conferencia de prensa, tres de siete regidores de la Villa de Etla denunciaron el nepotismo que prohíja el presidente municipal Daniel Ramírez Ramírez, al dar empleo en el ayuntamiento a 13 de sus familiares.
Igualmente, no ha efectuado sesiones de Cabildo y ha emprendido en una campaña de agresiones en contra de los concejales opositores y la población que critica su administración; expusieron incluso que las amenazas han llegado a daños ocasionados a sus vehículos particulares.
Los concejales Marco Antonio Robles Dávila, del PUP; Salvador Ojeda Torres, del PRD, y Lucía Vargas, del PRI, exigieron además al Congreso que dé entrada a la solicitud de revocación de mandato que interpusieron desde abril pasado.
Añadieron que de los más de 13 millones de pesos que recibe el ayuntamiento como presupuesto, más de seis millones de pesos se destinan a pago de nómina.
“El señor es un déspota y un arbitrario; la población sigue demandando obras y acciones y hasta ahora los ha ignorado”, dijeron.
Manifestaron que insistirán en la revocación de mandato del edil, pues ha promovido la división y el encono en ese municipio, también cabecera distrital.
El presidente municipal Daniel Ramírez, surgido del PRD, ganó mediante la coalición “Unidos por la paz y el progreso”, la misma que impulsó a Gabino Cué Monteagudo.
Agencia JM
