Diana Méndez
Los líderes religiosos señalaron que la situación en San Isidro El Arenal se ha agravado, con un grupo de habitantes destruyendo viviendas de los fieles no católicos y reteniendo a varios de ellos, incluyendo a una persona de la tercera edad. Esta serie de ataques ha generado una profunda preocupación entre los pastores y la comunidad cristiana en general.
Durante la protesta, los representantes de la Confraternidad expresaron su descontento con las autoridades locales y estatales. Criticaron la demora en la instalación de mesas de diálogo que podrían resolver el conflicto y buscar una solución pacífica. Los pastores enfatizaron que la intolerancia religiosa está desintegrando el tejido social y promoviendo un ambiente de conflicto y miedo.
“Lamentamos profundamente la tardanza en la intervención de las autoridades. Es imperativo que se establezcan de inmediato mecanismos de diálogo y solución para resolver este problema de intolerancia religiosa”, manifestaron durante la protesta. Los líderes religiosos hicieron un llamado urgente al gobernador Salomón Jara Cruz y al presidente Andrés Manuel López Obrador para que actúen con sabiduría y urgencia para garantizar la seguridad y los derechos de todas las personas involucradas.
Además, los pastores pidieron a la comunidad en general que se uniera en oración para que las autoridades tomen medidas adecuadas y efectivas para detener la violencia y restaurar la paz en la región.