La averiguación previa por los hechos violentos del 15 de febrero, durante la visita del presidente Felipe Calderón a Oaxaca, cuando un grupo de maestros de la Sección 22 del SNTE y simpatizantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca, (APPO), se enfrentaron con elementos de la Policía Federal Preventiva, continúa abierta y en proceso.
El Procurador de Justicia del Estado, Manuel de Jesús López López, se refirió así al caso en el que el secretario de Seguridad Pública del Estado, Marco Tulio López Escamilla fue agredido por el sub Director de la Escuela Secundaria Técnica número Uno, Sigfrido Olmedo Méndez, quien cuenta entre sus antecedentes penales con un homicidio y un asalto a mano armada y lesiones.
El funcionario explicó que la averiguación previa aún no ha sido consignada al juez correspondiente, sin embargo consideró que por tratarse de un delito menor en el que las lesiones a la víctima no ponen en peligro su vida y tardan menos de una semana en sanar, el expediente penal podría turnarse a la Sub Procuraduría de Justicia Restaurativa.
Pero aclaró que esto ocurriría si el ofendido, en éste caso el titular de Seguridad Pública del estado acepta otorgarle el perdón a su agresor, de lo contrario, la averiguación previa se turnaría a un juez penal.
Por su parte, Marco Tulio López Escamilla aseguró que otorgaría el perdón a su agresor Sigfrido Olmedo Méndez, si éste lo pide de manera personal, con ello, dijo, se estaría cerrando el expediente penal en contra del sub Director de la Escuela Secundaria Técnica número Uno.
El pasado 15 de febrero, sobre la primera calle de Guerrero a un costado de Palacio de Gobierno, el secretario de Seguridad Pública del Gobierno de Gabino Cué, Marco Tulio López Escamilla intentó desesperadamente buscar el diálogo con un grupo de activistas de la Sección 22 y de la APPO, que trataban de avanzar al zócalo de la ciudad en protesta por la vista de Felipe Calderón Hinojosa, pero a cambio fue recibido violentamente a golpes y patadas.
En las imágenes que se difundieron a nivel nacional e internacional, se pudo apreciar e identificar a los agresores, entre ellos a Olmedo Méndez.
HISTORIAL DE SIGFRIDO OLMEDO MENDEZ
En 1977, Sigfrido Olmedo Méndez, siendo estudiante y activista en el Centro Regional de Educación Normal, (CRENO), asesinó a balazos calibre 22 al estudiante preparatoriano Marcelino Emilio Osorio Pérez, cuando este se dirigía a su domicilio en la colonia Loma Linda, el cadáver fue encontrado en los entonces terrenos baldíos, en donde hoy se encuentran las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad, (CFE).
Los hechos ocurrieron cuando el hoy sub Director de la EST-1 y otros activistas realizaban un rondín de vigilancia en las inmediaciones del CRENO, cuyo plantel mantenían en su poder para exigir su reinstalación como alumnos, ya que un año antes habían sido enviados a la Normal de Cuautla Morelos, por las fricciones ideológicas que mantenían con el resto de los normalistas.
La detención de Sigfrido Olmedo ocurrió un año después del artero crimen, cuando junto con otros cuatro individuos, armados de pistolas, asaltaron y golpearon a unos parroquianos en el centro nocturno “Playa Azul”, durante su detención la Policía Judicial encontró entre sus archivos la orden de aprehensión en su contra por el delito de homicidio.
El 16 de octubre de 1978, el normalista fue sentenciado a 17 años de prisión por el delito de homicidio intencional simple, según el juez primero penal, Juan José Rodríguez Sánchez, quien confirmó así la autoría de los hechos.
En la Penitenciaría del estado, Olmedo Méndez aprovechó la detención de los militantes del Partido Revolucionario Obrero Clandestino Unión del Pueblo, (PROCUP), entre ellos a los hermanos Cortés Gutiérrez, para declararse “preso político” y con ello alcanzar el beneficio de la Ley de Amnistía, decretada el 6 de octubre de 1978 por el entonces gobernador Eliseo Jiménez Ruíz.
De esa manera el Comité Local Independiente Pro Defensa de Presos, Perseguidos, Desaparecidos y Exiliados Políticos, que comandaba la esposa de Arturo Cortés Gutiérrez, Mirna Gómez, lo incluyó en la lista de los beneficiados con la Amnistía, que con huelgas de hambre desde el interior del penal de Ixcotel presionaban al Gobierno del Estado la aplicación inmediata de la mencionada Ley.
Sin embargo, después de permanecer recluido casi dos años en el penal de Santa María Ixcotel, el 30 de enero de 1980, Sigfrido Olmedo logró su libertad por medio de un amparo otorgado por el Tribunal Colegiado de Veracruz, al considerar que no había elementos para sentenciarlo.
A pesar de todo, Olmedo Méndez, considerado el número dos de importancia en la estructura de la Unión de Trabajadores de la Educación, (UTE), una organización de corte marxista leninista y ala radical al interior de la Sección 22 del SNTE (como lo reconoce su propio dirigente, Rogelio Vargas Garfias) actualmente se desempaña como sub Director de la EST-1.
Agencia JM
