Christof Heyns, relator especial de Naciones Unidas sobre Ejecuciones Extrajudiciales, Sumarias o Arbitrarias, afirmó que México superará la actual situación de violencia, pero “no será con una varita mágica” ni utilizando a los militares, porque está demostrado que esa “estrategia no funcionó”.
En un informe sobre el tema, recomendó al Estado mexicano considerar el delito de homicidio como propio de la delincuencia organizada y trasladarlo a la jurisdicción federal.
Lo anterior, indicó, para permitir que las autoridades federales investiguen, persigan y juzguen aquellos crímenes cuando las autoridades estatales no estén en capacidad de hacerlo o carezcan de la voluntad para ello.
En torno a la Gendarmería Nacional, el esquema de 10 mil elementos propuesto por el gobierno de Enrique Peña Nieto para combatir el crimen organizado, solicitó que sea respetuosa de los derechos humanos.
Añadió también que debe garantizar que las tareas de seguridad se lleven a cabo según los estándares internacionales de respeto a los derechos humanos, además de ser sometida a medidas efectivas de rendición de cuentas y dirigida por personal civil ajeno al Ejército.
En conferencia de prensa tras concluir una visita a México, manifestó su preocupación por que las autoridades encargadas de la impartición de justicia carecen de independencia, lo que contribuye a la impunidad.
También aseguró que algunos procuradores estatales le expresaron “el miedo que tienen ante las amenazas y ataques” del crimen organizado, y añadió: “He recibido informes de que actores estatales o miembros del crimen organizado sometidos a juicio pueden recibir sentencias que son insuficientes.”
Según el relator de la ONU, el gobierno mexicano le informó que 60 por ciento de los homicidios ocurridos en los últimos años son obra del crimen organizado. En la pasada administración federal, dijo, hubo 102 mil 696 asesinatos dolosos.
Según el gobierno federal, al menos 60 mil fueron homicidios relacionados con las organizaciones criminales; sin embargo, precisó Heyns, existe una impunidad sistemática, debido a que solo 1 o 2 por ciento de los delitos, incluidos las ejecuciones, son condenados.
Sin embargo, reconoció la importancia que tienen las reformas en materia de seguridad impulsadas recientemente, debido a que contribuirán a cerrar el paso a la impunidad, y consideró positivo el cambio en el mensaje transmitido por las autoridades.
Dio la bienvenida al Pacto por México, porque su objetivo es “recuperar la paz y la libertad, disminuyendo la violencia”, además de que permitirá focalizar los esfuerzos del Estado para reducir los tres delitos que más afectan a la población: asesinatos, secuestros y extorsiones”.
El relator adelantó 31 recomendaciones al gobierno mexicano, aunque recordó que será hasta el próximo año cuando se presente el informe definitivo. En el corto plazo pidió que la seguridad sea garantizada por civiles y no por las fuerzas armadas.
Agencias