“Yo no soy de la presidencia municipal ni de la Casa de la cultura, yo soy del pueblo”, asegura con mucho orgullo el Maestro Alejandro Vera Guzmán, músico y escultor de Mascaras de diablos e imágenes religiosas.
Oriundo de Santiago Juxtlahuaca y perteneciente a la región Mixteca oaxaqueña. En el mes de Diciembre de 2014, exhibió en el Vaticano un nacimiento oaxaqueño, y regaló al Papa Francisco, en la Basílica de San Pedro, una imagen de Jesucristo que talló en madera con sus propias manos.
Del 10 de diciembre de 2014 al 15 de febrero de 2015, expuso el nacimiento en el Vaticano, “fue una experiencia maravillosa, porque me buscaron por el trabajo que hago”.
El escultor, que también tiene raíces en San Sebastián Tecomaxtlahuaca, se encuentra en el libro de los grandes maestros de Oaxaca. El Gobierno del Estado, buscó a las personas que trabajaban la madera y que podían realizar un nacimiento, “me pidieron una cara, y mande una de San José y le gustó mucho al Gobierno, después me pidieron una imagen completa de María, y la envíe. Llegó la gente del Vaticano, les mostraron varios trabajos y afortunadamente les agradó el mío”.
El vaticano, primero pidió que el nacimiento fuera tipo europeo, incluso el Maestro Vera, adicional a la información que le dieron, también buscó en Internet figuras europeas, sin embargo, el Gobierno de Oaxaca, le dijo que el nacimiento tenía que ser como el escultor Alejandro lo sabía hacer, y es que querían que éste, representara a los oaxaqueños.
“Me puse a copiar a la gente del pueblo, de los que acuden a la tienda de mi hermana a comprar, porque mi finalidad era que la gente de mi pueblo estuviera representada en el nacimiento”.
En junio del año pasado, comenzó a realizar el nacimiento y lo terminó en el mes de noviembre. Fueron 11 piezas de un metro con 20 centímetros, elaboradas por su esposa, dos hijos y el Maestro Alejandro Vera.
“Mi hijos de 15 y 12 años se dedicaron a los terminados y a la pintura, mientras nosotros tallábamos. Fue un proceso familiar”.
Alejandro Vera, hizo una virgen de Madera que su hermana donó a la iglesia de Juxtlahuaca; para realizar la escultura copió el rostro de su esposa, las manitas de su hija, y al angelito que está en la parte inferior, tomó el rostro de su hijo.
Exposiciones en:
- Nueva York
- España
- Alemania
- Dinamarca
- Fresno California
- Italia (Vaticano)
Premios y Reconocimientos
- Tercer lugar nacional en la creación de máscaras “Caras de México”. (1990)
- Primer lugar nacional en la creación de máscaras, “El encuentro de dos mundos”. (1992)
- Nominado al Premio Nacional de Ciencias y Artes.
- Nominado al Premio Nacional de la Juventud.
- Segundo lugar nacional en la creación de máscaras.
- Reconocimiento por su trayectoria en el Auditorio Guelaguetza (2008).
- Tercer lugar, categoría Madera tallada, en el IX premio Estatal de Arte Popular, “Benito Juárez” Máscaras de madera (septiembre 2009).
- Tercer lugar en la XXXIV edición del concurso Nacional. “Gran Premio de Popular”, Máscaras de madera (Octubre 2009).
- Reconocimiento del Ayuntamiento de Juxtlahuaca por el primer disco alusivo a la “Danza de los rubios”. (2009)
- Segundo lugar, categoría Madera tallada en el XI, premio Estatal de Arte Popular, “Benito Juárez” Máscaras de Diablo (2011).
- Participación como músico “Violín” de la Danza de los Rubios en el Festival de las Danzas. (Mayo 2012).
“Mi papá me platica que a los tres años hice la primer máscara de hueso de aguacate con un clavo; y ya cuando tenía 6 años, empecé a hacer máscaras con papel mache. A los 12 años, solito terminé mi primer mascara de madera porque nadie me enseñó”.
En 1990 ganó el tercer lugar a nivel nacional, (18 años), y cuando tenía 20, ganó el primer lugar a nivel nacional. A partir de ahí comienzan los reconocimientos y los problemas con el autoestima, “yo ya me sentía el mejor de todos, pero me dan la sorpresa que no, que la gente no me quería comprar. Me había decepcionado. Entonces me pregunté que de qué sirve ganar un premio”.
Recuerda que la maestra de la Academia de San Carlos, le dijo “la vida es una escalera y tu estas en el primer escalón, y con el premio te brincaste al último. Te ganaste el premio muy pronto, pero te hace falta recorrer toda la escalera, y a eso se le llama experiencia. Así que mejor ubícate y ponte a trabajar”.
En la ciudad de México tiene una obra expuesta en el museo de Arte popular, esa obra mide un metro con 20 centímetros. Apareció en un libro catálogo, donde hay grandes maestros de Oaxaca, como Francisco Toledo, entre otros.
“El problema con mi trabajo es que he ido a buscar oportunidades en galerías, pero me dicen que es muy bonita mi obra, pero que sigue siendo artesanal. Y voy con la gente que vende artesanía y me dicen que es muy bonita mi obra, pero que no se vende en sus tiendas porque es muy cara. Entonces decidí venderlas por mi cuenta”.
Afortunadamente el Maestro Vera, tiene una agenda llena de pedidos para la región de la Mixteca, el Estado de Guerrero, San Luis Potosí, Tampico y Estados Unidos.
El escultor y músico asegura que los diablos no tienen nada de diabólico, “los artesanos copiaron a la misma gente del pueblo, porque no había internet, no había periódicos. Son caras muy enojadas pero no tienen nada de diabólicos”.
“Muchos años trabajé mascaras de diablos para la escuela de Bellas Artes. Ahí me invitaron para que llevara la Danza de los Diablos al desfile del Bicentenario, entonces quedamos en la historia de México con nuestra danza”.
En el 2005 empezó a formar la banda de música con niños del municipio que ahora se llama “Santiago Apostol”. En 2011 empezaron a tocar todo tipo de música.
“Hacemos espectáculos con la Danza de los Rubios. La banda da su concierto y cerramos con la Danza de los Diablos. La gente se emociona mucho porque no estamos llevando a un ballet, sino a la gente del mismo pueblo”.
El Maestro Alejandro Vera, junto con su banda de música, está por grabar el segundo disco con un tipo de música diferente. También se encuentra haciendo bocetos para pintar en la técnica de oleo.
Por Janet Martínez
Vía: Viral Noticias
