Oaxaca está llamada a ser un modelo de ciudad patrimonio, para lo cual la sociedad debe asumir su responsabilidad, las autoridades demostrar sensibilidad y respeto a la ley para identificar su vocación y cuidarla, coincidieron especialistas en el tema patrimonial.
En el marco del Festival Oaxaca, Festival de las Ciudades Patrimonio que concluyeron este sábado, cerró con la ponencia: “Espacio público y movilidad urbana en una ciudad patrimonio” que impartió en la Casa de la Ciudad, Víctor Rico, director de Proyectos Especiales de la Autoridad del Espacio Público de la Ciudad de México.
Asimismo, en el Teatro Macedonio Alcalá tuvo lugar la mesa redonda: “Oaxaca actual, Ciudad Patrimonio” con la participación de Enrique X de Anda Alanís de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO); Ciro Carballo Penichi, experto de la UNESCO; Boffy Efrain Cotom Ulin del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y Víctor Rico integrante de la Autoridad del Espacio Público de la Ciudad de México.
En su ponencia, Rico compartió las acciones que se emprenden en la Ciudad de México para garantizar la movilidad y rehabilitar espacios públicos que bien habían sido abandonados o que estaban invadidos por el comercio informal.
Destacó que para ello se creó un concepto que es el urbanismo táctico que busca recuperar los espacios públicos y vincular permanentemente su vocación con las necesidades de convivencia y encuentro de la sociedad capitalina.
La mejor inversión en una ciudad, dijo, es en la infraestructura urbana para garantizar el uso de peatones de espacios públicos, para lo cual alguno se cierran semanalmente al paso vehicular para crear espacios de convivencia a través de la instalación de mobiliario de estancia y la colaboración de prestadores de servicio de la zona que se han visto beneficiados con estas medidas.
Consideró que en Oaxaca hay muchas opciones de recuperar espacios urbanos que están subutilizados y recuperar otros que han sido retenidos por grupos de comerciantes ambulantes, para lo cual es importante la voluntad de las autoridades y la participación activa de la sociedad.
Durante la mesa redonda: “Oaxaca actual, Ciudad Patrimonio”, los especialistas participantes admitieron que actualmente existe una crisis de credibilidad en las instituciones, por ello es que es necesario darla un valor único a la ciudad que es el desarrollo del ser humano, hacer una lugar de encuentro de la población y no un espacio de sobrevivencia.
Consideraron que en Oaxaca es falsa la política en materia turística que solo promueve el patrimonio edificado o antiguo, cuando la riqueza del estado descansa en su patrimonio inmaterial, en su cultura y en su gente que construye a diario su realidad cultural.
Pero señalaron que para poder entender el patrimonio, primero debemos conocer su historia para cuidarlo y el derecho preponderante en este goce y disfrute es primero para sus habitantes y después para el turismo, por lo que en la medida en que se diversifique se obtendrán mayores beneficios.
Ejemplo de ello, es la comida que integra uno de los atractivos turísticos del estado; no obstante el hábito alimenticio de los oaxaqueños parece perseguir otras formas de alimentación ajenas, cuando ni siquiera se consumen todos los productos y platillo del recetario tradicional que está olvidado.
Lamentaron que en el Centro Histórico, como en muchos del país, es cada vez más creciente el fenómeno del cambio de uso de suelo al pasar de ser vivienda a comercio, cuando las casas no se construyeron para ese fin.
Estimaron necesario impulsar dos acciones, por un lado, la concertación en todos los sentidos para garantizar un plan de manejo responsable de la ciudad y la zona metropolitana que puedan realizar profesionales oaxaqueños, pues son quienes más conocen la realidad; y por otra, mayor audacia para emprender inicialmente proyectos de rescate y luego de difusión que promuevan a Oaxaca en el país y fuera de él.