El ex Director del Instituto Oaxaqueño Constructor de la Infraestructura Educativa, el priista Jesús Ángel Díaz Ortega negó que sea perseguido político por el gobierno de Gabino Cué Monteagudo; se auto descartó para ocupar un cargo de elección popular y recomendó rescatar la ciudad de Oaxaca.
Reservado en sus respuestas, Díaz Ortega aseguró en entrevista que no es prófugo de la ley. “No estoy prófugo, mi situación es administrativa y ya se resolvió, nada que ver; la cuestión es administrativa, es cuando se comete una omisión, en este caso de unas obras que las tomaron como que no estuvieran hechas, y ya estaban hechas”.
Cantinflesco, Díaz Ortega trató de evadir las preguntas, remitiéndose a comentar que está dedicado a su trabajo de constructor en Toluca, Estado de México.
“No tengo el pulso completo de la situación política y social de Oaxaca. Me objetaron después de que contestamos (la demanda). De las auditorías ni me meto, yo me avoco a lo mío. Las obras que me objetaron no figuraron porque no se habían licitado, eso es una falta administrativa.”
Al preguntarle sobre temas de relevancia social, como el aumento al impuesto predial, el ex presidente de la ciudad de Oaxaca refirió primero que los priistas “necesitamos rescatar la ciudad de Oaxaca”, pero enseguida aclaró que “hablo del rescate familiar, artesanías, urbanización, una serie de cosas que no se han hecho”. Y cauteloso recordó que “nosotros tampoco podíamos con un paquete tan grande, hay que entenderlo”.
Del polémico asunto por incrementos del impuesto predial, Díaz Ortega recomendó que “hay que hacerlo de manera que no moleste (a la ciudadanía), paulatinamente con incrementos no tan fuertes”.
Entrevistado en la sede estatal del PRI, “Chucho bolas” aseguró que “hora no hay aspiraciones, estoy trabajando en Toluca, en la construcción”, cuidando así sus expresiones que podrían meterlo en problemas políticos o legales.
Agencia JM
