La decisión de Nueva Alianza de separarse de la coalición electoral que mantenía con el PRI y con el Partido Verde, no implica una ruptura con el presidenciable Enrique Peña Nieto, aseguró Elba Esther Gordillo, en entrevista para la revista Contenido y el portal de Internet Uno Noticias, propiedad del empresario Carlos Slim.
“No hay ruptura con el licenciado Peña. No la hay. Hay una relación cordial. Con él pudimos dialogar profundamente; con él pudimos ver, yo personalmente, cuestiones del tema educativo, de la agenda social, con la que hay cierta coincidencia”, dijo entrevistada en su casa por el periodista Pablo Reinah.
Gordillo es presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), gremio que fundó al Partido Nueva Alianza en 2005.
La maestra detalló que la salida del Panal de la alianza PRI-PVEMque competirá en las elecciones del 1 de julio se dio al no alcanzar acuerdos respecto de en cuáles estados se concretaría la coalición.
“Mientras el PRI creía que se podía ir (en coalición) con 13 estados (…) Nueva Alianza decía ‘no, son 10’, a la hora de la verdad, al consultar (el PRI) a sus abogados, se dieron cuenta que nada más se podía 10, y al discutir cuáles se bajaba (del convenio) vino la controversia y allí estuvo el conflicto”, explicó Gordillo al aclarar que ella no condujo las negociaciones.
El pasado sábado, un día después de que se confirmó el “divorcio” electoral, el presidente del Panal, Luis Castro, dijo a ADNPolitico.com que la disputa por las candidaturas había roto la alianza.
“En términos jurídicos no podíamos ampliar los estados donde ellos querían que participáramos, porque la ley lo impide, aunque esto estaría sujeto a interpretación del tribunal; y, aritméticamente, porque también nos pedían participar en algunas entidades que nos representan un voto importante para Nueva Alianza, necesario para nuestro registro y nuestro crecimiento”, señaló Castro.
Gordillo insistió en que se trató de un asunto de aritmética electoral, con el fin de garantizar el registro del Panal. Para tal objetivo, el partido debe obtener por lo menos el 2% de la votación en los comicios federales.
La dirigente del magisterio aclaró que el Panal “no es patrimonio personal”, sino una opción política para defender temas como laeducación, la seguridad social, la equidad y la justicia.
Sobre los candidatos presidenciales, aclaró que no descalificaría a ninguno. No obstante, ahora Nueva Alianza debe competir con uno propio, y Gordillo enfatizó que su abanderado tendrá que comprometerse con la educación pública de excelencia a todos niveles, con el respeto a la autonomía, independencia y derecho a la huelga de los sindicatos, y que sea alguien muy cercano a la sociedad.
Gordillo se dijo “malinterpretada e incomprendida” por el PRI, partido que la expulsó en el año 2006, según ella misma recordó.
En junio pasado, la profesora admitió en conferencia de prensa que apoyó al entonces candidato presidencial Felipe Calderón a cambio de puestos de gobierno en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), la Lotería Nacional y el Sistema Nacional de Seguridad Pública. Aunque no lo mencionó, su yerno, Fernando González, fue designado subsecretario de Educación Básica de la SEP desde el inicio del sexenio de Calderón.
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