Comunicado
15:26 Santiago Niltepec.-A la puerta de entrada de la zona productora de mango del istmo de Tehuantepec llegó Gabino Cué para reencontrarse con sus amigas y amigos niltepecanos, para invitarles a seguir sumando a más y más gente y reafirmar la seguridad en el triunfo del pueblo en las elecciones de este cuatro de julio, y subrayó: “Pero no nos confiemos, tenemos que hacer un esfuerzo más, organizarnos, participar y cuidar las casillas.”
Luego de escuchar la bienvenida de la presidenta de este municipio –Porfiria Toledo Sánchez-, el candidato de la paz y el progreso expresó: “Estamos tan solo a once días de la fecha que hombres y mujeres han esperado, lo he visto en los ojos de la gente a lo largo de todas las reuniones, ¡Oaxaca ya decidió y quiere el cambio!”.
Son centenares las personas que aplauden al escuchar los nombres de los aspirantes a las alcaldías de esta zona oriente del Istmo: Sixto Carlos, de Zanatepec; Ahuízotl Castillo, de Chahuites; Vicente Landeta, Unión Hidalgo; Cándido Ríos, de Reforma; y por supuesto el de casa, Jorge Luis Castillo, que recuerda el atraso y lacerante marginación en que se debate la gran mayoría de las comunidades de la entidad, y asegura: “Pero en medio de este tiempo nublado, la propuesta de Gabino Cué es un gran aliciente para los pobres”.
Ahora es Arturo García Felipe, el abanderado de la Coalición por el distrito XXIII quien señala: “No queremos más de lo mismo que traen de nuevo los priístas, que no nos tiemble la mano ni el corazón, vayamos a la gran fiesta por el cambio, por el progreso y la equidad”.
Es un sol candente de mediodía istmeño el que cae a plomo, que acaso agobie el cuerpo pero no la inteligencia de quienes escuchan con atención a Gabino cuando expone las cuatro condiciones necesarias para ganar los próximos comicios: en primer lugar la voluntad de los partidos coaligados –PRD, PAN, PT y Convergencia-, así como las organizaciones sociales, que han puesto el interés de Oaxaca, por encima de todo.
Las propuestas, dice, son el segundo requisito “y a ese respecto organizamos 16 foros temáticos en diversas ciudades, en los cuales firmamos compromisos que formarán parte de nuestro programa de gobierno y que tienen como eje fundamental una política social encaminada a abatir los rezagos, el lastre que nos han dejado los gobiernos priístas”. Y el tercero: tener un buen candidato. Esto lo indican los resultados de encuestas serias que nos ubican a la cabeza de la preferencia ciudadana.
Pero la cuarta condición -subraya- es la más importante, la organización de la estructura electoral para cuidar las casillas, para que no nos roben las elecciones. Y puntualiza: “Con estas bases sólidas, el próximo cuatro de julio vamos a celebrar el triunfo de Oaxaca”. Aquello se vuelve un mar de aplausos y un incesante tronadero de cohetones.
Antes de finalizar, recuerda el debate pendiente con el candidato de Ulises Ruiz y sostiene: “Yo lo decía, si se negaba a debatir era porque algo ocultaba, y ya apareció el peine; nos hicieron llegar evidencias de que el tal Eviel participó en actos de corrupción por 177 millones de pesos, por lo menos, cuando fue Secretario de Obras Públicas del gobierno estatal”.
Junta los pulpejos de una mano y asegura, “además, hay cinco razones más para que se siga negando al debate”, a lo que la gente sonríe en señal de victoria.
El mar de gente se desborda en regocijo, los aplausos aumentan, la esperanza comienza a tomar colores de realidad, el cambio viene con paz y progreso.