Momentos antes de encabezar el Desfile Militar de este 16 de septiembre, el gobernador del Estado, Gabino Cué Monteagudo, demandó a la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) reiniciar a la brevedad posible las clases, al empezar la quinta semana de paro de actividades educativas.
Entrevistado, antes de iniciar el Desfile Militar, urgió a los trabajadores de la educación en la entidad a reponer las clases perdidas, al no arrancar todavía el ciclo escolar.
Consideró que el “derecho de libre manifestación está consagrado en la Constitución Política, siempre y cuando se respete el derecho a terceros; más que pensar en volver al plantón deben valorar volver a las aulas”.
Cuestionó que hasta el momento, un millón 300 mil niños en Oaxaca permanecen sin clases en poco más de 14 mil planteles de las 8 regiones del estado, derivado al paro de 70 mil trabajadores de la educación.
Admitió la inconformidad real de padres de familia y autoridades en varios municipios, lo cual requerirá un ejercicio de distensión para garantizar el retorno a clases y evitar la confrontación y violencia,
“Necesitamos prudencia en Oaxaca”, sostuvo.
Sobre el uso de la fuerza pública para retirar el plantón de maestros de la plancha del zócalo en la Ciudad de México, afirmó no estar a favor dado que “eso es el último instrumento”.
Expuso que algunos “infiltrados” dentro del movimiento magisterial el pasado viernes y que generaron escasas confrontaciones con las fuerzas federales, “la gran mayoría de maestros y maestras se retiró a tiempo”.
Consideró que es esencial la continuación de las mesas de diálogo entre la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y la Secretaría de Gobernación (Segob), a fin de dar salida a los planteamientos de los maestros sobre la Reforma Educativa.
No hay fecha definida para el regreso a clases en Oaxaca, pero esperamos que sea a la brevedad, confió el mandatario estatal.
“El único límite para atender las demandas de la CNTE, incluida la Sección 22 del SNTE es la propia ley y el techo presupuestal, no hay ningún otro argumento para no mejorar la calidad educativa”, enfatizó.







