Cada vez que Dos Santos tocaba la bola se escuchaba el grito de ‘borracho’, de nueva cuenta la estrella del Galaxy se sintió incómoda y propició una actuación muy discreta en el juego de vuelta de la Liga de Campeones Concacaf.
En uno de los palcos del Estadio Corona se encontraba el técnico de la Selección Mexicana, Juan Carlos Osorio. Dos Santos quiso demostrar destreza y capacidad para ganarle a un equipo mexicano, sin embargo, su primer partido oficial en su país fue todo un desastre.
Al acabar el encuentro, Dos Santos se vio con un viejo conocido: Jared Borgetti.
Uno de los máximos goleadores de la Selección Mexicana y Santos Laguna, bajó para saludar a Giovani dos Santos tras la tormentosa noche. Borgetti con una playera de Los Ángeles en la mano, despedía al de raíces brasileñas.
Al salir de la charla con Jared, Giovani fue custodiado por un personal de LA Galaxy donde prefirió evitar a los medios y retirarse del lugar.
Dos Santos probablemente recordará esta noche toda su vida; el día en que sus paisanos le dieron la espalda por meterse con la principal estrella de Santos Laguna.
Agencias
