* Las encuestas internas de Morena y del gobernador Salomón Jara favorecen a Benjamín Robles Montoya con 48 puntos, a Susana Harp Iturribarría con 38 dígitos, a Chico Martínez Neri con 28 puntos. Nino Morales Toledo solo alcanza 12 puntos y Laura Estrada Mauro 6 puntos.
* Jara no descarta que sus amigos y compañeros de lucha no sean candidatos al Senado porque no les alcanzan los números y porque a Nino se le atraviesa Adelfo Regino, por ello, aunque aceptó sus renuncias, nombró encargados, dejando la puerta abierta a su regreso.
El proceso electoral federal concurrente, el más grande en la historia política de México, es una caja de sorpresas inesperadas para el presidente Andrés Manuel López Obrador y sus gobernadores.
La irrupción del fenómeno político Xóchitl Gálvez descompuso el cuadro al primer mandatario. Ensoberbecido, estaba convencido de que la imposición de su sucesor sería un feliz día de campo.
Dicho está que la vida y la política son de circunstancias permanentemente cambiantes y que el dinero a manos llenas ayuda mucho, pero desafortunadamente no es todo para alcanzar las metas.
Por falta de carisma y empatía, la falta de crecimiento político de sus queridos amigos Laura Estrada Mauro y Nino Morales Toledo tiene metido en serios problemas electorales al gobernador.
A la luz de los resultados de las encuestas internas ordenadas realizar por el mandatario estatal, a Laura y Nino no les alcanzan los números. Los enanos no crecieron en la Primavera Oaxaqueña.
Las preferencias electorales confirmaron el temor del titular del Ejecutivo, el diputado federal del Partido del Trabajo, Ángel Benjamín Robles Montoya, encabeza las encuestas con 48 puntos.
Entendible porque Robles Montoya lleva muchos años en permanente campaña brincando familiarmente de la diputación local a la federal y al Senado de la República junto con su esposa.
Le sigue con una diferencia de diez puntos la senadora del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Susana Harp Iturribarría, al alcanzar un puntaje de 38 dígitos de aceptación electoral.
Y para sorpresa de propios y extraños, a pesar de su pésimo gobierno municipal, Chico Martínez, como le llaman en su natal San Andrés Zautla, cuenta con una preferencia electoral de 28 puntos.
Como es lógico y natural, al no estar en el ánimo de Salomón Jara por jugarle las contras, al apoyar a Susana Harp como candidata a gobernador, Chico Martínez no se reelegirá como edil capitalino.
En cambio, el controvertido secretario de Administración, ya que es público y notorio que mantiene el férreo control de esa importante dependencia, solo alcanza 12 puntos de preferencia electoral.
No obstante, el abultado presupuesto de la Secretaría de Bienestar, en peor posición se encuentra la cirujana dentista, especializada en ortodoncia, Laura Estrada Mauro, con únicamente 6 puntos.
Salomón Jara siempre se ha apoyado en la dos veces presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado y el dirigente del Frente Único de Comunidades Oaxaqueñas (FUCO).
Con el firme propósito de corresponder al permanente apoyo de Laura Estrada y Nino Morales para ser gobernador, Salomón Jara les puso a caminar arropados por los comités de defensa de la 4T.
Jara no descarta que sus amigos y compañeros de lucha no sean candidatos al Senado de la República porque no les alcanzan los números y porque a Nino se le atraviesa Adelfo Regino.
El director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) cuenta con el invaluable apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador, dados sus positivos resultados de trabajo.
Tan es así que aun cuando el gobernador Salomón Jara aceptó la renuncia de ambos, más por formalidad legal, nombró encargados en ambas secretarías, dejando la puerta abierta a su regreso.
Entretanto, Jesús Romero López, seguirá dedicado a hacer negocios familiarmente en todos lados incluyendo el turismo y la gastronomía, hasta la movilidad de los migrantes que arriban a Oaxaca.
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