14:18 Con solo 11 años de edad, Alfonso Manríquez Pérez ya construyó un robot y junto con sus compañeros trabaja en su programación.
Él forma parte de un grupo de 33 alumnos de excelentes calificaciones de quinto y sexto grado de primaria, que fueron elegidos para ser parte del proyecto Incubadoras de Niños Genios que desarrolla la Universidad Politécnica de Victoria.
“Cuando me dijeron que participara me emocioné, se me hacía divertido y emocionante y sí me gusta mucho”, comenta el pequeño, quien lleva primer lugar en el Colegio Antonio Repiso.
En la primera etapa del proyecto participaron 144 niños de 85 primarias de la ciudad, que fueron invitadas por la Universidad Politécnica.
El director del proyecto, Eddie Nahum Armendáriz Mireles, explicó que los alumnos fueron divididos en seis grupos que recibieron clases de mecánica, electrónica, robótica y tecnología de la información.
Mencionó que el programa nació como una forma de vincular la universidad con la sociedad enfocándose en los alumnos con mejores promedios de nivel primaria.
El proyecto actualmente se encuentra en una segunda etapa en la que participan 33 alumnos que destacaron y mostraron interés por aprender más sobre estos temas. Ellos reciben información sobre programas de animación digital en 3D y programación de robótica.
Armendáriz agregó que el hecho de que los niños aprendan conocimientos de áreas de ingeniería no significa que reciban la misma información que un estudiante universitario.
“Por ejemplo vemos desde mecánica y de mecánica vemos mecanismos simples desde palancas, levas, engranes y hacen practicas con carritos, aprenden a ver como manejar una palanca y manejar una leva y levantar peso y lo visualizan con algo físico, una grua o algo que les presentemos”, expresó.
Yousi Victoria Balleza también forma parte del proyecto, “yo me siento muy contenta porque fui afortunada de estar en este proyecto, nunca imaginé que iba a conocer un robot y ahorita me gusta mucho”.
La alumna de primer lugar del quinto grado de la escuela Luis Torres Vázquez, y ganadora del tercer lugar en la olimpiada de matemáticas, aseguró que le encanta aprender nuevos conocimientos, “la robótica me gusta mucho. Vamos creando nuevos proyecto y aprendiendo”, comentó.
Para Magdalena García, madre de Yousi, es un orgullo tener una hija genio, “estoy muy orgullosa, porque aquí vemos que el esfuerzo que hacemos como papá y estar detrás de ellos vale la pena. En inculcarles hábitos de estudio, formándose metas y que alcancen sus sueños”, resaltó.
Armendáriz Mireles destacó que se desarrollen proyecto de está naturaleza que coordinan tres maestro con apoyo de estudiantes universitarios destacados de ingenierías, ya que los niños que participan contarán con herramientas más avanzadas que otros muchachos de su edad.
“Les prestamos un foro, la tecnología y espacio a los niños a temprano edad que encuentren motivación para darle seguimiento, ellos van a tener una herramienta muy poderosa intelectualmente van a tener una gama muy amplia donde moverse. Estamos abriendo un foro donde las tecnologías de la información, la robótica, la mecánica, la electrónica es la base del programa”, apuntó.
Indicó que si algún niño lo desean lo podrán continuar asesorando en estos temas, pero que de manera individual, ya que el proyecto culmina en está segunda fase. Aunque señaló que espera que para septiembre empieza la segunda generación de la incubadora de genios.
Subrayó la seriedad de Incubadora de Niños Genios al contar con instalaciones con una tecnología donde los niños tienen acceso y a la que ni los propios estudiantes de la Universidad Politécnica usan.
Reconoció que México vive un déficit en desarrollo tecnológico por lo que apostarle al recurso humano es la mejor opción, “si desde temprana edad conocen la tecnología que se les está enseñando van a tener una herramienta abierta cuando quieran desarrollar algo ya sea programación o ingeniería”, concluyó.
El Universal