Bolivia examina la respuesta de países europeos a su reclamación diplomática por el incidente con el avión del presidente Evo Morales y su posición definitiva será secundada por Ecuador, dijeron el martes los dos gobiernos en Quito.
Durante su primera visita oficial a Ecuador, Morales aseguró que su administración ya ha recibido explicaciones o excusas por parte de España, Francia, Italia y Portugal por impedir el sobrevuelo de su avión al regreso de un viaje de Rusia el 2 de julio. “Se ha expresado las disculpas correspondientes, estamos en consulta (…) y mañana (miércoles) el gabinete hará una evaluación”, declaró el líder boliviano en una rueda de prensa.
El percance sufrido por Morales derivó en una dura reclamación por parte de varios países sudamericanos, que decidieron el retorno temporal de sus embajadores en los respectivos países europeos en solidaridad con el mandatario.
El vuelo de Morales fue obstruido porque, según La Paz, había sospechas de que transportaba al excontratista de inteligencia estadounidense Edward Snowden, acusado por Washington de espionaje tras revelar un programa de vigilancia de las comunicaciones de alcance global.
Según Correa, Quito acompañará la posición definitiva que asuma su socio de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), un bloque regional que reúne a países abiertamente críticos de Estados Unidos. Si los bolivianos “aceptan las disculpas, los embajadores (ecuatorianos) se reintegrarán a sus puestos. En caso de que las disculpas no sean satisfactorias para Bolivia, continuaremos con las consultas a nuestros embajadores”, subrayó.
El mandatario ecuatoriano describió la actuación de los gobiernos europeos como un abuso, un agravio y una ofensa contra su homólogo y le reiteró su pleno respaldo a la protesta que encabeza contra esas naciones. “Evo no tiene por qué sentirse agraviado, tiene que sentirse enaltecido con su actitud tan soberana, tan digna, tan antiimperialista al impedir esa agresión”, sostuvo Correa, refiriéndose a la actuación de Morales al prohibir que su avión fuera requisado por un diplomático español.
Por su parte, Morales sostuvo que para él, es “clarísimo que fue el gobierno de Estados Unidos” el que dio la orden de obstaculizar su sobrevuelo bajo sospecha de que viajaba junto a Snowden, quien permanece varado en Moscú a la espera de una respuesta a su petición de asilo al gobierno ruso.
“Ahora podemos darnos cuenta de cuáles son los patios traseros de Estados Unidos”, criticó el jefe de Estado boliviano, en alusión a los gobiernos europeos involucrados en la controversia.
Tras el bloqueo denunciado por Morales, Bolivia, Nicaragua y Venezuela ofrecieron asilo al informático estadounidense.
Además del respaldo del gobierno de Correa, Morales tenía previsto participar en un acto de apoyo organizado por movimientos indígenas y sociales en el cierre de su visita de un día a Quito.
Durante la cita presidencial, Bolivia y Ecuador suscribieron cinco acuerdos de cooperación en salud, justicia, medio ambiente, comunicación y cultura. Uno de los convenios permitirá la restitución de bienes arqueológicos, artísticos, históricos y culturales que hayan sido robados, traficados o comercializados ilícitamente en uno u otro país.
El comercio entre ambas naciones llegó apenas a 52,4 millones de dólares en 2012 (21,7 millones en exportaciones ecuatorianas y 30,7 millones en importaciones), según el Banco Central de Quito. En 2007, las ventas de Ecuador a Bolivia se ubicaron en 13,4 millones y las compras en 9,6 millones, mientras que de enero a mayo de 2013, fueron por 7,5 millones y 40 millones, respectivamente. “Es una vergüenza”, dijo Correa en alusión a ese intercambio comercial, y aseguró que los gobiernos trabajarán para mejorar sus nexos.
AFP