A mi Padre; por sus primeros 75 años de vida honesta y productiva.
Estamos exactamente a 3 domingos de que se lleve a cabo la jornada electoral para elegir al Presidente de la República, Senadores y Diputados; es por ello que deseo compartir mi pronóstico de cómo llegarán posicionados los candidatos a la presidencia días previos al 1 de julio. Quiero remarcar que los porcentajes de intención del voto que he proyectado, serán las cifras finales reportadas antes de la elección y no cómo se darán los resultados una vez realizado el cómputo de votos correspondiente. No se trata de una encuesta realizada a 1,557 ciudadanos que nadie sabe quiénes o de dónde son; se trata de la proyección de un escenario donde he considerado las tendencias electorales al día de hoy, la serie de posibles eventos que pudieran registrarse, así como la estrategia de los candidatos y de sus institutos políticos y por supuesto de la opinión de diversos ciudadanos sin una filiación partidista determinada.
Debo antes exponer que el único propósito que me llevó a realizar el ejercicio que hoy les comparto, es sostener la tesis de que ningún candidato –lo subrayo— ningún candidato tiene asegurado el triunfo para el próximo domingo 1 de julio y que por el contrario asistiremos a una competencia cerrada entre tres candidatos que son (en orden alfabético): Andrés Manuel López Obrador, Enrique Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota. Cualquiera de ellos que anticipe un triunfo abrumador, arrollador, contundente o insuperable sabe que está mintiendo, pues como lo explicaré más adelante serán los que hoy aparecen como “indecisos” los que habrán de definir el día 1 de julio y no antes, quien habrá de guiar el destino de nuestro país los próximos 6 años. Voy pues al rango de porcentajes entre los que concluirán su campaña los aspirantes presidenciales, de igual forma lo hago en orden alfabético: Andrés Manuel López Obrador: 27%-25%; Enrique Peña Nieto 28%-26%; Gabriel Quadri de la Torre 5%-3% y Josefina Vásquez Mota 26%-24%. Lo pongo por separado, los indecisos 14%-12%. Vistas estas cifras, dirían los expertos en operación electoral: “hay empate técnico”.
Como podemos darnos cuenta, ninguno superará previo a la elección (por más que algunos medios electrónicos e impresos publiquen lo contrario) el rango del 30%, por lo que al tratarse de una elección competida entre tres aspirantes la cifra mágica será para el o la que obtenga un porcentaje superior al 33% de la votación efectiva y es ahí donde seguramente trabajarán para “jalar” hacia ellos lo que se conoce como el voto útil. Por lo que la pregunta que habremos de hacernos es ¿de qué dependerá que esos electores inclinen su voto a favor de uno de ellos?
Resulta más que claro que serán dos los segmentos que habrán de inclinar la balanza a favor de uno de ellos: el de los jóvenes y el de las mujeres. Por lo pronto en base a la serie de manifestaciones promovidas principalmente por jóvenes universitarios identificados dentro del movimiento #YoSoy132, todo parece indicar que ya la juventud tiene claro por quien no votar, aunque como es deseable se espera que su voto sea resultado del análisis y de la reflexión y no de una manipulación ideológica o peor aún, partidista. Hasta ahora he visto jóvenes responsables, con una claridad de qué es lo que quieren y cómo lo deben hacer, por lo que habrá de estar tranquilos al saber que estamos presenciando el surgimiento de una generación de jóvenes con un alto compromiso democrático y político que indiscutiblemente serán determinantes para elegir el futuro de nuestro país.
Por su parte las mujeres, que son mayoría en el padrón electoral que se utilizará en la jornada electoral, habrán de decidir si votan por un candidato que físicamente les parece atractivo, o por una mujer que al igual que ellas sabe de los problemas que enfrentan, o por un candidato que les ofrece apoyos tangibles. Para nadie es desconocido que al interior del seno familiar la opinión de la Madre, de la esposa, de la hija suele influir determinantemente en la percepción de los demás, razón por la que acceder al voto de las mujeres se convertirá en una labor prioritaria en las próximas semanas. Es por ello que al igual como lo vienen haciendo los jóvenes, es indispensable el que las féminas analicen y comparen propuestas, que indaguen sobre los antecedentes de cada uno de ellos, pues recordemos que generalmente como es y se comporta uno en la casa, es como se comportará uno en público.
Pero como en casi 4 semanas que restan de campañas pueden pasar muchas cosas, es necesario que se esté atento a la serie de acontecimientos que habrán de desarrollarse y que influirán en la determinación de ese grupo de “indecisos” que ahora todos quieren tener de su lado. No podemos soslayar que nuestra moneda ha sufrido en los últimos días una devaluación y aún cuando se sostiene que es por cuestiones externas, una visión en el sentido de que una nueva crisis económica pudiera presentarse, podría modificar el destino del voto. Lo mismo sucedería, si como se ha venido rumorando desde semanas atrás, el gobierno federal presenta a uno de los narcotraficantes más buscados y con ello se destapa la red de complicidades que hay en torno a su persona y que pudiera afectar a personalidades de la alta esfera política nacional. O qué decir de la serie de aprehensiones de políticos vinculados a tal o cual partido político y con ello incrementar la imagen de corrupción con los que se les identifica por sus acciones pasadas. El segundo debate será sin duda otro de los factores que habrán de incidir notoriamente en la percepción del electorado. Será a través de estos eventos como el o la candidata logre terminar la jornada electoral con un porcentaje superior al 33%, lo que lo hará ser nuestro próximo Presidente o Presidenta de la República.
Con casi un mes de anticipación les comparto mi pronóstico previo a la elección; no digo cómo quedarán en Oaxaca para no caer en proselitismo político a favor de nadie, pero sí confirmo lo que sostuve desde hace varias semanas, que habrá una votación diferenciada en el estado. Ya lo corroboraremos.
Twitter: @Mario_Mendoza_F