La economía mexicana tiene suficiente flexibilidad para manejar los riesgos relacionados con la crisis de deuda en Europa y el menor crecimiento de Estados Unidos, destacó la directora del Banco Mundial (BM) para México y Colombia, Gloria Grandolini.
Consideró que la economía mexicana se encuentra en una posición muy buena, con un alto nivel de reservas internacionales y un crecimiento estable, estimado por el BM en 3.8 por ciento este año y en 3.5 por ciento en 2012, pero sin caer en recesión.
La funcionaria del organismo financiero internacional señaló que el crecimiento de la demanda interna ha ayudado a la economía mexicana a enfrentar el menor crecimiento de Estados Unidos.
En entrevista con Notimex, dijo que al igual que América Latina, México tiene un crecimiento estable y también enfrenta riesgos relacionados a lo que pueda pasar con la crisis de deuda en Europa y la desaceleración económica de Estados Unidos.
Para Grandolini, si se empeora la situación en Europa y en Estados Unidos, el canal de contagio posible para la economía mexicana es por el comercial.
El contagio por el canal comercial vendría sobre todo de Estados Unidos, a donde México destina 80 por ciento de sus exportaciones y, por ello, es claro que una caída en la economía estadounidense puede provocar un impacto en el crecimiento nacional.
Sin embargo, precisó, el Banco Mundial no ve un impacto a nivel de contagio financiero en México debido, por un lado, a que ha habido muchas mejoras en la materia, el sector bancario está muy fuerte y hay una mayor supervisión bancaria.
Por otro lado, porque el financiamiento externo está en muy buena posición, México tiene muy buena confianza de los mercados y se puede seguir financiando a largo plazo.
Entonces, insistió, aunque el contagio puede ser más por el canal comercial, el hecho de que México tenga una política macroeconómica estable crea espacio para utilizar la política fiscal y monetaria si fuera necesario para apoyar la demanda interna, en caso de que hubiera una mayor caída del mercado externo.
Así, aunque el entorno económico internacional es adverso, el país tiene un crecimiento y una macroeconomía estable, y aunque hay riesgos, tiene suficiente flexibilidad para manejarlos, destacó.
El BM proyecta que la economía mexicana crecerá 3.8 por ciento en 2011 y 3.5 por ciento el año próximo, pero Grandolini acotó: “Yo no hablaría de recesión”.
“Realmente hablaría más bien de mantener flexibilidad a nivel de política macroeconómica interna, para responder internamente y hacerle frente si hubiera una desaceleración de la demanda externa”, insistió.
La directora del BM para México y Colombia puntualizó que hay que seguir observando la situación externa, porque la incertidumbre ha crecido mucho y será importante ver qué pasa el próximo mes con Europa y Estados Unidos.
Sin embargo, dijo, México se encuentra en una muy buena posición y será muy importante para el país el liderazgo que tendrá en el Grupo de los 20 (G-20), ya que a partir de 2012 asumirá la Presidencia de este foro de cooperación y consulta que reúne a los países industrializados y emergentes.
Entonces, subrayó Grandolini, el mensaje para México es positivo, pero hay que seguir observando qué pasa en el resto del mundo.
Notimex