De acuerdo con el estudio “Perspectivas turísticas”, los visitantes buscan encuentros sexuales, aventura y gran dosis de adrenalina.
México incursiona en el llamado turismo negro para viajeros que gustan de la aventura y gran dosis de adrenalina, por lo que ya se comercializan a nivel internacional recorridos por el barrio bravo de Tepito, visitas al estado de Chiapas para atisbar a los guerrilleros zapatistas e incluso convertirse por unas horas en inmigrante ilegal y ser perseguidos por la patrulla fronteriza de Estados Unidos.
De acuerdo con el estudio “Perspectivas turísticas”, dado a conocer por el Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial (GMSI), el turismo tradicional ha bajado 0.5 por ciento tan sólo en 2010, derivado de la inseguridad y la violencia en el país.
“Los visitantes buscan encuentros sexuales y turismo negro, mientras pierden participación en el mercado los viajes tradicionales y médicos. México comienza a ser un destino atractivo para viajeros que gustan de la aventura y gran dosis de adrenalina”, refiere el documento.
El turismo negro aflora en México y se solicitan recorridos inusuales a lugares donde hubo una masacre. “Se piden incluso fotografías de impacto de bala y hasta rastros de lucha entre cárteles. Se trata de visitantes muy peculiares que buscan emociones fuertes y que proceden de Europa y Estados Unidos esencialmente”, comenta Alejandro Desfassiaux, presidente de GMSI.
El turismo negro o “de morbo”, explica el estudio, es el que pretende lucrar con el dolor ajeno, y misteriosamente cobra muchos adeptos a escala mundial, donde pagan por ser presos en la isla del mar Adriático llamada Goli Otok, recorrer la central nuclear de Chernobil o visitar en Delhi las ciudades perdidas donde transitan los niños en extrema pobreza.
El documento revela que más de 40 páginas en internet señalan a México como “sitio ideal” para el turismo sexual y se ofrecen paquetes turísticos que incluyen el abuso sexual de menores en diferentes partes del país, pero todo previamente coordinado con las seudoagencias de viajes del turismo negro.
“La explotación sexual de menores es la tercera categoría más lucrativa en el ámbito internacional, tras el narcotráfico y la venta de armas. Tristemente en México esto representa un atractivo para visitantes procedentes de Estados Unidos, Inglaterra, Holanda y Alemania, seguidos por Canadá, Italia y Suiza”, refiere el directivo.
La inseguridad y la violencia han provocado que el sector turístico tradicional bajara 0.5 puntos porcentuales sólo durante 2010. “Se afectó el flujo turístico debido a las advertencias de riesgo de viajes (Travel Warning) y a las malas recomendaciones emitidas al respecto por parte de algunos gobiernos europeos”, destaca.
Entre otros destinos se alertó sobre Monterrey, Chihuahua, Sinaloa, Durango, Coahuila, Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán, Ixtapa, en Zihuatanejo, Acapulco y Nayarit.
En cuanto al turismo médico, se mencionó que el descenso en los hospitales fronterizos era de 60 a 70 por ciento en el número de pacientes. “Algunos estímulos a este tipo de turismo, como honorarios médicos y medicamentos a menor coste, no resultaron tan atractivos al correlacionarlos con el nivel de inseguridad existente en la frontera”, reveló.
El turismo tradicional es más seguro en seminarios y convenciones, donde se puede ver en el número de integrantes que no ha tenido cambios significativos. “Sólo se detectan cambios del destino de las sedes, pero no cancelaciones de eventos”, puntualiza el documento.
En marzo de 2009, MILENIO dio a conocer cómo en Mazatlán, Sinaloa, los taxistas dan un tour muy especial a los turistas. Los taxistas cuentan las historias de los capos, y recorren los sitios donde han ocurrido enfrentamientos, balaceras y ejecuciones en uno de los lugares más golpeados por el narcotráfico.
– Claves
Lugares de interés
• Tepito, Chiapas, Chihuahua, Ciudad Juárez, entre otros puntos de la República mexicana forman parte de los principales lugares de atracción para el turismo negro.
• Alrededor de 40 páginas en internet señalan al país como “sitio ideal” para el llamado turismo sexual.
• En Mazatlán, por $300 pesos, los taxistas dan un recorrido por las casas, propiedades y restaurantes que pertenecieron a los grandes capos de la droga en México.