Anualmente se registran más de 75 mil nacimientos en el estado, de los cuales el 50 por ciento son atendidos por los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), ante ello, se tiene el firme compromiso de vigilar que cada oaxaqueña tenga una gestación y alumbramiento sin riesgos, principalmente en los municipios alejados de la capital.
Así lo informó, la jefa del departamento de Equidad de Género y Salud Reproductiva de la institución, María Teresa Gutiérrez Cruz, quien dijo que proteger el bienestar de las mujeres durante el embarazo, al igual que la del recién nacido es una prioridad.
Por ello, se fortalecerán las estrategias a lo largo y ancho del territorio, principalmente en los 32 hospitales y 671 centro de primer nivel de atención que cuentan con sala de expulsión, a fin de reducir los índices de mortalidad materno-infantil, basado en garantizar la accesibilidad a la atención médica.
Esto, a través de consultas especializadas, control y seguimiento prenatal, así como el suministro de complementos vitamínicos, la aplicación de vacunas y las pruebas de laboratorio que se necesitan, de manera gratuita por medio del Seguro Popular.
Aseveró que del 2009 a la fecha, se llevaron a cabo 30 capacitaciones al personal de salud sobre el manejo correcto de las emergencias obstétricas y reanimación neonatal, así como la dotación de cajas rosas y guindas, para la estabilización de mujeres que presenten complicaciones.
En este sentido, la funcionaria destacó la importancia de acudir por lo menos seis veces al especialista durante esta etapa, la primera tiene que ser antes de las 12 semanas de gestación, las otras dos en el segundo trimestres, y en el último período una visita cada mes.
“Ante la sospecha de embarazo, la mujer debe adoptar algunas precauciones básicas como: evitar exponerse a sustancias o agentes perjudiciales, caminar, nadar o hacer alguna actividad de bajo impacto, así como una alimentación equilibrada, ya que contribuyen al correcto desarrollo del feto, a nueve meses sin molestias, y un parto sin dificultades”, agregó.
Precisó que los signos de alarma como dolor de cabeza, zumbido de oídos, vomito abundante, hinchazón de parpados, pies y piernas, o sangrado, deben considerarse urgentes por lo que al ser detectados se tiene que solicitar atención de inmediato.
Asimismo detalló que los peligros asociados a esta etapa de la vida se reducen considerablemente si se dejan pasar por lo menos dos años entre cada hijo, así como evitar este proceso antes de los 20 y después de 35 años.
Finalmente, aseveró que una de las metas del programa Embarazo Saludable, es que todas las mujeres cuenten con asistencia eficaz y oportuna, durante el embarazo, parto y puerperio.
