La Unión para las Libertades Civiles de Estados Unidos precisó que hasta el 20 de agosto un total de 528 niños permanecen separados de sus padres
Más de 500 menores migrantes que fueron separados de sus padres al cruzar sin documentos la frontera sur de Estados Unidos permanecen aún detenidos y sin haberse reunificado con sus familiares, de acuerdo con el gobierno federal.
Los datos, difundidos por la Unión para las Libertades Civiles de Estados Unidos (ACLU), precisaron que hasta el 20 de agosto un total de 528 niños permanecían separados de sus padres. De esa cifra, 23 niños son menores de cinco años.
El rezago apenas mejoró respecto de la semana anterior, cuando 565 menores se encontraban separados aún de sus padres, pese a que había pasado casi un mes desde que una corte ordenó al gobierno del presidente Donald Trump a finalizar todas las reunificaciones familiares de migrantes.
La orden de la corte disponía que se reunificara a los más de dos mil 650 niños migrantes, cuyas edades oscilaban de pocos meses hasta los 17 años de edad, con sus padres. Las separaciones ocurrieron en el lapso de seis semanas que el gobierno de Trump implementó la política de “tolerancia cero”.
La fecha límite para la reunificación era el 26 de julio pasado, cuando el gobierno aceptó que aún mil 600 niños seguían separados de sus familiares.
Los documentos proporcionados por el gobierno a la corte radicada en San Diego, donde se lleva el caso, revelaron además que los padres de 343 niños ya no se encuentran en Estados Unidos debido a que fueron deportados o salieron del país. De este grupo, seis niños son menores de cinco años.
ACLU precisó que 139 padres manifestaron su deseo de no ser reunificados con sus hijos. De estos casos, defensores han señalado que varios padres fueron obligados a renunciar a sus derechos de reunificación.
En estos casos, el gobierno pretende dejar a estos padres sin ninguna clase de reparación. ACLU sin embargo ya ingresó una demanda para revertir estas decisiones y para demostrar que varios padres fueron presionados por funcionarios de migración para renunciar a solicitudes de asilo.
ACLU indicó además que durante la primera semana de este mes, el gobierno finalmente entregó una lista de números de teléfono de la mayoría de los padres deportados. Desafortunadamente, hasta ahora, muchos de los números de teléfono ya no funcionan, de acuerdo con ACLU.
En una declaración publicada en su página de internet, ACLU señaló que muchos de estos padres de menores aún en Estados Unidos pueden estar escondidos en sus países de origen, de los que una buena parte huyó en primera instancia porque temía por su vida.
Otro obstáculo para finalizar las reunificaciones, destacó ACLU, es que el gobierno ha argumentado que las familias solo pueden reencontrarse en sus países de origen, lo que significa que niños con una solicitud de asilo deben renunciar a ésta para poder reunirse con sus padres.
Si los padres no quieren que sus hijos pierdan la oportunidad de buscar protección en Estados Unidos, entonces los menores tendrán que sortear solos el sistema de asilo estadunidense, con el peso de la separación, puntualizó ACLU.
Fuente: lopezdoriga.com