El senador Manlio Fabio Beltrones se bajó de la contienda para competir por la candidatura del PRI a la Presidencia en aras de “la unidad”.
Una semana antes de la inscripción de candidatos, y días después de los cambios de última hora que se fijaron en la convocatoria, el legislador dio a conocer sus motivos en una carta dirigida a la militancia priista y a la opinión pública.
Aseguró que no habrá rupturas en el PRI y que su declinación, lejos de ser un sacrificio, será la aportación que hará para la victoria de su partido.
“Este es uno de los momentos de la vida y la política en que uno se tiene que decidir entre aspirar a ser una figura importante o ser un hombre útil. Hoy he decidido no participar en el proceso interno por la candidatura presidencial, optando por ser un hombre útil al interés de mi país y de mi partido, al que sueño renovado y liderando la construcción de una nueva nación próspera y segura”, afirmó.
El senador rechazó tener obsesiones personales o conductas mezquinas y reiteró la necesidad de competir en un ambiente de unidad, debido a que hay quienes piensan que el adversario a vencer es el PRI, y en sus obsesiones lo ven como el enemigo principal.
Aunque hizo una larga referencia a la necesidad de la unidad, como un factor de verdadero cambio y mejora para el país, cuestionó la finalidad de ésta y advirtió que si no se puede responder a la pregunta ¿unidad para qué?, se estaba poniendo en riesgo la victoria de 2012.
“Siempre he insistido en que la unidad es un punto de llegada, no de partida. La unidad se construye con una idea común, con reglas claras, con transparencia, con equidad y sin exclusiones. De lo contrario, sólo nos queda el refugio de la responsabilidad. Eso lo sienten perfectamente bien los militantes que se están preparando para la difícil lucha política que viene”, expuso.
Advirtió que algunos personajes en su partido han insistido con prisa en la unidad “para conservar sus privilegios o garantizar sus intereses personales o de grupo”.
Dijo que es esa minoría la que se opone a las reformas para modernizar al país. Sin embargo, también remarcó que hay un grupo de priistas que coinciden con la urgencia del cambio en el país, y será con ellos con quienes seguirá trabajando.
Incluso afirmó que la lucha que mantiene a favor de las reformas puede ejecutarla “desde cualquier trinchera política”.
Beltrones mantuvo un discurso conciliatorio a lo largo de la carta; sin embargo, también advirtió que la simulación y la ingratitud son “los peores venenos de la política” y han hecho daño a un partido que en las dos últimas elecciones presidenciales ha competido dividido y perdido la contienda.
“Siempre he sabido que la militancia es superior a la dirigencia y, por ello, nuestro partido ha resistido las grandes derrotas y se ha levantado. Hoy no será la excepción”, indicó.
Milenio