Más de 30 personas murieron debido a las lluvias que azotan los estados brasileños de Minas Gerais y Río de Janeiro, informaron ayer medios locales.
Durante el martes, 13 cuerpos fueron retirados de entre los escombros en Sapucaia, a 165 kilómetros de la capital provincial Río de Janeiro, donde ocho viviendas quedaron enterradas bajo una avalancha ocurrida el lunes. Otras dos muertes fueron registradas en las ciudades de Laje de Muriaé y Paty do Alferes.
La Defensa Civil de Río estima que aún permanecen enterrados entre 9 y 10 cuerpos en la localidad de Jamapará, donde ocurrió el alud. No existen posibilidades de que haya sobrevivientes. Según informó ayer el secretario de Defensa Civil, Sergio Simoes, existe el riesgo de que ocurran nuevos deslizamientos de tierra, por lo que calificó el trabajo de los equipos de “altísimo riesgo”.
“Existe la posibilidad de nuevos deslizamientos y desprendimientos de piedras”, indicó. Esto se debe a que la localidad de Jamapará está localizada en una ladera junto al río Paraíba do Sul.
Para rescatar los cuerpos, los equipos de búsquedas, integrados por efectivos de la Defensa Civil y del Cuerpo de Bomberos, trabajan con ayuda de perros rastreadores y máquinas. También cuentan con el apoyo de personal del ejército.
Además de las víctimas fatales, 10 mil 601 personas tuvieron que ser desalojadas en todo el estado de Río y siete municipios decretaron situación de emergencia. Se trata de Laje do Muriaé, Santo Antônio de Pádua, Itaperuna, Italva, Cardoso Moreira, Miracema y Aperibé.
El secretario provincial de Ambiente de Río, Carlos Minc, informó que todas las ciudades del noroeste bañadas por el río Muriaé realizarán obras para desviar el exceso de agua y levantar un dique de contención.
En la última semana, dos diques cedieron ante la fuerza del desborde de los ríos, inundando por completo las localidades de Tres Vendas, en la ciudad de Campos, y de Outeiro, en el municipio de Cardoso Moreira.
Unas cinco mil personas tuvieron que ser evacuadas. En tanto, en Minas Gerais 117 ciudades decretaron el estado de emergencia a raíz de las precipitaciones que se registran desde octubre pasado. Allí 15 personas murieron, 36 resultaron heridas y hay dos millones 251 mil 574 de damnificados, según la Defensa Civil. La última ciudad en decretar el estado de emergencia fue Além Paraíba, vecina de la ciudad carioca Sapucaia, donde tres personas murieron y un centenar fueron desalojadas. Efectivos del ejército se encuentran en el lugar colaborando con la recuperación del municipio, que se quedó sin agua potable. Además, una fisura constatada en uno de los diques de contención de la ciudad mantiene en alerta a tres barrios que podrían quedar parcialmente inundados en caso de que la barrera acabe cediendo.
A raíz de el bloqueo de varias carreteras, el principal hospital de la ciudad quedó inaccesible por más de 24 horas. Desde que comenzó el periodo de lluvias, 112 puentes resultaron completamente destruidos y otros 148 sufrieron daños importantes. Unas seis mil casas fueron dañadas, 12 mil 875 personas tuvieron que abandonar sus viviendas hasta que cesen las lluvias y otras mil 240 tienen sus casas completamente destruidas.
Darán visas a haitianos
Brasil dará visas de residencia a miles de inmigrantes haitianos pobres que ingresaron ilegalmente al país desde Bolivia y Perú buscando trabajo, dijeron el martes funcionarios del gobierno.
La potencia económica emergente de América Latina, que sólo hace una década veía a sus ciudadanos emigrar para escapar de una crisis financiera, atrae ahora a miles de haitianos que huyen de la nación caribeña, devastada por un terremoto.
Agencias
