En el Teatro de la República de esta ciudad, “escenario de vigorosa riqueza histórica”, Gabino Cué, gobernador electo de Oaxaca, hizo una enérgica defensa de las alianzas y las coaliciones políticas, al tiempo que convocó “a prepararnos “para ser protagonistas y no espectadores de las grandes transformaciones que reclaman los ciudadanos”, y precisó: “Más claro todavía, debemos prepararnos para ir al rescate de la transición”.
En el marco de la Jornada Cívica Nacional organizada por el presidente de Convergencia, Luis Walton Aburto, con eventos en Dolores Hidalgo, Querétaro y la Ciudad de México, Gabino afirmó que la esperanza de la transición democrática al iniciar el siglo XXI, al darse la alternancia en la Presidencia de la República, no se ha consolidado.
Ahora estamos ante el enorme desafío, precisó, de profundizar los cambios, transformar las leyes y alcanzar una honda reforma política que aliente la participación ciudadana. Que alcancemos, en los hechos, el gobierno de la gente.
Para rediseñar México con un proyecto que ofrezca nuevas alternativas, Gabino definió varios desafíos: el de la unidad, el del pasado al futuro, el que nos recuerda que no hay paz sin justicia y el de la participación de los ciudadanos, para que sean ellos los que guíen el destino de México.
Respecto del desafío de la unidad, el gobernador electo de Oaxaca aseveró que en todas las democracias modernas hay alianzas, acuerdos, encuentros y desencuentros. Y después de ejemplificar que lo que ocurrió con las elecciones de gobernador en Oaxaca está más allá de los partidos, aunque se apoyó en ellos, dijo que deben sentirse orgullosos de la alianza quienes dejaron sus diferencias para unirse en torno a un ideal superior.
La alianza, puntualizó, es el triunfo de la tolerancia contra la intolerancia, la victoria de la inclusión contra la exclusión, el triunfo de los ciudadanos que se movilizaron de manera asombrosa por un cambio y una transición.
“En Oaxaca, amigos y compañeros de lucha, se unió la voluntad y el corazón y contra eso no hay obstáculo que sea imposible superar”, enfatizó Cué, para agregar:
“Si podemos mantenernos unidos en la diversidad, si logramos ir juntos con el motor de las ideas, con la fuerza de la verdad y con la voluntad de innovar y cambiar, estoy seguro que escribiremos una página de éxito para la democracia.”
Manifestó que la agenda del cambio no implica destruir al pasado. Se trata de eliminar las malas prácticas, fortalecer los buenos programas, y precisó refiriéndose al país: “…sobre todo, de desterrar la corrupción de los políticos que han desviado la ruta: México no tiene dueño, ni es una parcela propiedad de caciques o partidos políticos”.
Y al reconocer que Convergencia, el partido que lo llevó hace nueve años a conquistar la presidencia municipal de Oaxaca, está haciendo una enorme aportación a la cultura de la unidad y de los acuerdos, Cué convocó a construir el Estado socialdemócrata: incluyente y solidario, con una economía social de mercado; un Estado enfocado a devolver la confianza en el ciudadano libre y responsable.
Dijo también en el Teatro de la República y en presencia de la dirección nacional de Convergencia, encabezada por su presidente, el senador Luis Walton Aburto, y ante cuadros locales y funcionarios del gobierno del estado:
• Las ideas libertarias de Hidalgo, son una lucha inacabada y permanente. Sin educación y sustento no hay verdadera libertad.
• Los Sentimientos de la Nación de Morelos, son los del ciudadano del siglo XXI. Sigue el deber de moderar la opulencia y la acumulación de riqueza ante la amarga realidad de quienes apenas subsisten.
• El Sufragio Efectivo de Madero mantiene vigencia en una democracia todavía sujeta a las dádivas que aprovechan la miseria, frecuentemente sometida por la ambición de otros poderes fácticos.
• Y la demanda de Zapata: tierra para trabajarla, tener un modo honesto de vida, es un deseo latente en nuestro corazón y especialmente de miles de jóvenes que no encuentran trabajo.
Nuestra generación no puede quedarse con los brazos cruzados, requerimos mirar más alto, dijo Gabino Cué, para añadir que hay que premiar la imaginación y el talento, estimular la búsqueda de oportunidades. “Ése es el camino. Hay millones de jóvenes mexicanos que hoy tienen ideas, imaginación y coraje para romper los paradigmas de nuestro sistema caduco, un sistema que se ha vuelto complejo y caótico”.
Y al recordar que no hay paz sin justicia, advirtió que en Oaxaca no perderá el tiempo en la división. Precisó:
“Sencillamente procuraremos dar a cada quien lo que corresponde. Premiar a quienes lo merecen y castigar a quienes abusivamente se aprovecharon y lucraron indebidamente con el poder. La justicia puede volver a unir lo que el miedo dividió.”
En la Jornada Cívica Nacional estuvieron también, acompañando a Luis Walton y a Gabino Cué, Jorge García en representación del gobernador del estado; el alcalde de Querétaro, Francisco Domínguez Servín; Luis Maldonado Venegas, coordinador del grupo parlamentario de Convergencia en el Senado de la República; Armando López Campa, Secretario General del CEN de Convergencia y José Luis Aguilera Ortiz, presidente del Comité Directivo Estatal de Convergencia.