La LXIV Legislatura legalizó las instituciones comunitarias utilizadas por los pueblos indígenas y afromexicano, para la operación de sus sistemas de agua potable.
Mediante una reforma al Artículo 12 de la Constitución Política del Estado de Oaxaca, quedó establecido el reconocimiento del derecho de los pueblos y comunidades de operar sus propios sistemas comunitarios de agua y saneamiento a través de sus propias instituciones y formas de gobierno.
Por esto, el Estado tendrá la tarea de poder otorgar los recursos necesarios para garantizar la operación de dichos sistemas comunitarios, y facilitar la gestión de los mismos.
En Oaxaca operan comités, consejos comunitarios y el tequio, como alternativas que coadyuvan a satisfacer la demanda de agua potable y saneamiento, particularmente en segmentos rurales y periurbanos de la población en distintos grados de pobreza. Estos mecanismos garantizan una mayor equidad en la distribución del recurso hídrico.
De esta manera, la Diputación Local crea las bases para que la gestión comunitaria reciba el apoyo de los gobiernos locales, que garanticen el ofrecimiento de servicios de calidad, accesibilidad y sin discriminación.
La reforma fue presentada por la diputada Juana Aguilar Espinoza, integrante del Grupo Parlamentario de Morena, dictaminada por la Comisión Permanente de Estudios Constitucionales y aprobada por el Pleno de la LXIV Legislatura Local.
