Un avión de combate de la Fuerza Aérea iraquí dejó caer una bomba por error, tras presentar un problema técnico, cerca de la base militar de Rasheed, en las afueras de Bagdad, con un saldo de siete personas muertas y 11 heridas.
“Una de las bombas quedó atascada debido a un problema técnico, y durante el retorno (de la aeronave), el artefacto explosivo cayó sobre tres casas en la zona”, señaló un vocero de Servicios de Seguridad, general, Saad Maan.
El avión regresaba de un bombardeo contra posiciones del Estado Islámico (EI) en territorio iraquí, cuando se produjo el accidente en el aparato, aclaró Maan.
Las autoridades locales indicaron que la explosión, que se produjo cerca de la base aérea de Rasheed, también hirió al menos a 11 personas.
Según informaciones de los medios de comunicación locales, la bomba causó también daños en tres edificios residenciales.
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