El Papa Francisco lamentó hoy el prevalecer de las tensiones en Ucrania y puso a rezar por ese país a miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro.
El pontífice se refirió al conflicto ucraniano durante su mensaje dominical pronunciado después de la bendición con el Angelus, la oración mariana que impartió desde la ventana de su estudio personal en el Palacio Apostólico del Vaticano.
Recordó que este día se celebra la fiesta nacional de Ucrania y por eso su pensamiento “va en modo particular” a esa “amada tierra”.
Improvisando y saliéndose del discurso preparado, contó que la víspera recibió una carta de un obispo ucraniano (aunque no reveló cuál) que le expresó todo el dolor y las dificultades que padecen los pobladores.
“Pienso en todos sus hijos e hijas, y en sus anhelos de paz y serenidad, amenazados por una situación de tensión y de conflicto que no se aplaca, que genera tanto sufrimiento entre la población civil”, indicó.
“Confiamos al señor Jesús y a la Virgen a la entera nación y rezamos unidos sobre todo por las víctimas, sus familias y cuántos sufren”, añadió refiriéndose al conflicto abierto entre Ucrania y los milicianos pro rusos en diversas zonas del país.
Entonces comenzó a rezar el Ave María en voz alta, al cual se sumaron las miles de personas presentas. Al término invocó a la Virgen, reina de la paz.
Agencias