Después de varias negociaciones y una amenaza de explosión de bomba, un ladrón que mantenía a más de 30 rehenes en un banco en Argentina, se entregó a la policía después de que su esposa hablará con él.
A medio día un grupo de delincuentes ingreso al Banco Nación de Pilar, tomaron a 40 clientes de rehenes y asaltaron la sucursal, la policía entró a evitar el asalto y se inició un tiroteo, del cual pudieron huir varios de los ladrones, excepto uno.
El “Cheto”, como es identificado el asaltante que mantuvo a los 40 rehenes, se mantuvo durante cinco horas en comunicación con varias televisoras argentinas. Amenazaba con explotar una bomba si no le mandaban un auto e iba un juez.
Primero dejo salir a algunos rehenes (embarazadas y jubilados) a cambio de comida. Después de cinco horas llegó su esposa e instantes después se entregó a las autoridades. No huno muerto ni heridos.
Josué Rodríguez Coronel, de 20 años, ya contaba con una orden de aprehensión por varios robos violentos en la misma sucursal bancaria y a los alrededores de la misma.