10:35 La selección mexicana de futbol llegó esta mañana a Johannesburgo, donde en menos de una semana inaugurará el campeonato mundial de este deporte ante la nación anfitriona, Sudafrica.
El equipo mexicano llegó alrededor de la 08:30 horas locales (01:30 horas de México) y fue recibida en la zona de carga de la terminal O.R. TAMBO por el embajador mexicano en esta nación, Luis Cabrera Cuarón.
El equipo tricolor llegó a bordo de una Jumbo 747 de la línea aérea Luthansa, procedente de Alemania, de donde salieron tras su triunfo del jueves pasado en Bélgica ante su similar italiano dos goles a uno.
Rodeados de un hermético dispositivo de seguridad que impidió el paso de prácticamente toda la prensa que se reunió, los mexicanos fueron abordando de manera paulatina el autobús que los conducirá a su primer escala mundialista: el hotel Thaba Ya Batsawana, donde se hospedarán durante su permanencia en Johannesburgo.
Los jugadores mexicanos llegaron elegantemente vestidos, portando saco azul marino, corbata azul con ribetes verdes, camisa clara y zapatos negros.
El vehículo que los llevó a su hotel traía, por cierto, la leyenda: “Es tiempo de un nuevo campeón” y ocupó el centro de una caravana vehicular.
En ese convoy, que fue vigilada en las calles en lo que se alejaba del aeropuerto por policías que portaban metralletas figuraban agentes de seguridad, los vehículos de los delegados así como algunos medios de comunicación que los siguieron.
El equipo mexicano iniciará su participación en este mundial de futbol, el 11 de junio venidero enfrentando en el estadio Soccer City de esta ciudad a Sudáfrica en un partido del grupo A en el que también figuran Uruguay y Francia.
Francia también llegó
La selección francesa de futbol, que encabeza el jugador del Bayer, Franck Ribery y dirige el controvertido Raymond Domenech, aterrizó en Sudáfrica, adonde llega con las dudas que alimentó ayer su derrota frente a China (1-0).
Procedentes de las Islas Reunión y recibidos por el sonido de las “vuvuzelas” en el aeropuerto de George, al sur del país, Henry, Anelka, Gallas y compañía llegan con la difícil misión de emular su actuación en el Mundial 2006, donde cayeron en la final frente a Italia.
EL UNIVERSAL
