Carina García
17:05 Desde arriba las lonas multicolores: rojas, azules, verdes, rosas; abajo el ruido ensordecedor de los puestos de discos piratas combinado con el calor humano, calor de infierno; esta es la postal del centro de la ciudad. Y es que son ya ocho días de que el Zócalo Capitalino se ha convertido prácticamente en un “tianguis” ante el plantón que mantienen los agremiados al magisterio oaxaqueño.
Entre las calles aledañas al corazón de esta capital oaxaqueña, el olor es insoportable; los transeúntes se llevan la mano a la nariz y boca para poder hacer frente a la fetidez que se agudiza con el paso de las horas.
Mientras, en los campamentos de los agremiados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Sección 22, los casi once mil mentores de la Costa Oaxaqueña duermen, ríen y uno que otro lee un libro para hacer menos pesada su jornada de lucha.
Y es que a pesar del estigma que se han ganado a pulso los profesores: flojos, huevones, sucios, destructores, estos han amenazado con iniciar su plantón indefinido el próximo 14 de junio ante la falta de respuestas a su pliego petitorio de demandas según el líder de la gremial Azael Santiago Chepi.
Aunque las mesas de negociación han sido instaladas entre la dirigencia sindical y funcionarios de alto nivel, Santiago Chepi aseguró que hasta el día de ayer se había avanzado, pero no lo suficiente como para descartar que más de un millón de estudiantes de educación básica se queden sin clases el próximo 15 de junio.
Situación que ha causado molestia y preocupación entre los líderes de comerciantes ubicados alrededor del centro de la ciudad, quienes exhortaron a los profesores evitar otro escenario como el del 2006.
Y es que el conflicto sociopolítico dejó huella y marco, sobre todo económicamente, a todos y cada uno de los expendedores no sólo del Centro Histórico sino de diversas partes de la entidad.
A pesar de que las condiciones no son las mismas que hace cuatro años, el comercio informal ubicado alrededor de este plantón ha generado pérdidas importantes para el establecido; los restaurantes han dejado de ser concurridos así como otros negocios.
En tanto y dentro del “tianguis”, como han llamado al platón magisterial, los collares de colores, artesanías, discos piratas, comida, antojitos regionales, agua entre otros productos son los más buscados por los propios mentores.
La molestia de los transeúntes, poco o nada han contribuido para que este plantón regional masivo. Y es que mientras los maestros se mantienen en el Zócalo Capitalino decenas de niños se encuentran sin clases.
Y es que mientras la dirigencia sindical asegura no tener respuestas contundentes a sus demandas, el secretario General de Gobierno (Segego), Evencio Nicolás Martínez manifestó que las mesas de negociación continúan avanzando.
Pero mientras ambas partes se enfrascan en una serie de conversaciones, la ciudadanía que obligatoriamente tiene que transitar por esa zona, soporta los olores, la postal que ofrece el corazón de la ciudad.
