“Tenía una sensación, un presentimiento tan fuerte que esa noche no podía dormir, teníamos unos borreguitos que lloraban, me paraba, los veía y lloraban, vi que se metieron a su corral y me metí a la casa, me iba a acostar cuando empezó el temblor suave, le dije a mi esposa está temblando… ella salió corriendo y el temblor empezó más fuerte… yo tomé el brazo de mi niño para salir, nos caímos y vimos como todo se venía abajo”, relató con un sentimiento de tristeza y nostalgia don Rodolfo Jiménez Balcázar, habitante de Asunción Ixtaltepec.
Él y su esposa Deisy Santiago fueron de las familias que perdieron sus casas durante el sismo de 8.2 grados, ocurrido la noche del 7 de septiembre del 2017. Ante el momento de caos vivido en ese momento, don Rodolfo buscó proteger a su familia para evitar otra desgracia.
“No teníamos luz, estábamos a obscuras pero logré escuchar el gas como se escapaba, le dije a mi esposa, toma al niño y vete aléjate de la casa, voy a buscar el tanque para cerrarlo…tenía miedo de que pudiera estallar en cualquier momento, entre los escombros lo encontré y como todo se había caído, no sabía ni por donde salir”, comentó.
Debido a las afectaciones de su hogar y al temor de actos de rapiña, Don Rodolfo y su familia pernoctaron en una casa de campaña que pudieron rescatar de entre los escombros, sin embargo los alimentos comenzaron hacer falta, no así la solidaridad de la gente.
“No teníamos donde comer ni nada, entonces las diferentes familias, vecinos, gente de otros pueblos nos traían de comer y no estuvimos solos…el ejército también pasó por acá y la Cruz Roja, nos dieron despensas, nos auxiliaron tomándonos placas de Rayos X por los raspones que teníamos, pero afortunadamente sólo quedo en eso”.
Las condiciones climatológicas que en ese momento se vivían en el Istmo de Tehuantepec fueron un problema considerable para las familias damnificadas.
“Teníamos mucha tristeza porque después del temblor nos vinieron lluvias, aires, era muy desesperante no tener un hogar donde refugiarse”, mencionó don Rodolfo.
Conforme pasaba el tiempo los apoyos gubernamentales comenzaron a llegar a Ixtaltepec, se realizó el censo de su vivienda y bajo las condiciones en que se encontraba fueron apoyados con 120 mil pesos para la reconstrucción de la misma, sin embargo esta familia tuvo que pasar otra difícil situación.
“Desafortunadamente gente sin corazón me clonaron mi tarjeta de apoyo, tuve que andar dando vueltas y peleando para que me regresaran el dinero, pasamos un calvario para lograr rehacer nuestra casa”, refirió.
Gracias a la iniciativa privada, fideicomisos y fundaciones como “Échale a tu casa”, muchas de las familias damnificadas pudieron reconstruir su hogar, una de éstas, la familia de don Rodolfo.
“Nos llegó información que en el Palacio se encontraban diferentes empresas que apoyaban para construir con las tarjetas que dio el gobierno, por lo que nos acercamos a “Échale a tu casa”
“Tuvimos confianza en ellos porque no nos pidieron las tarjetas de inmediato sino hasta que hubiera un avance, nos pareció muy bien porque otras empresas quitaban las tarjetas y se quedaban con ellas y era la duda de saber si me construyen o me las quitan y se van”, relató.
La Sociedad Hipotecaria Federal es otro organismo aliado para otorgar créditos a las familias damnificadas para que puedan obtener un crédito y con ello ampliar o mejorar la construcción de sus viviendas, por lo que la Familia de don Rodolfo Jiménez optó también por esta opción.
“La casa tenía otro precio más elevado por las dimensiones que nos gustaron, por eso me vi en la necesidad de pedir un préstamo a la Sociedad Hipotecaria Federal quien me otorgó de inmediato el crédito para ampliar mi casa y hacerla de conformidad a como mi esposa y yo la requeríamos”, destacó.
Ahora don Rodolfo, su esposa Deisy y su pequeño hijo disfrutan de su nuevo hogar hecho con materiales y técnicas antisísmicas, gracias también a las facilidades y oportunidades que brindan Fundaciones como “Échale a tu casa” que se encuentran apoyando en la reconstrucción del Istmo.
Actualmente esta fundación realiza alrededor de 549 acciones en municipios como Ixtaltepec, Ciudad Ixtepec, Juchitán de Zaragoza, San Dionisio del Mar, San Francisco del Mar y Santiago Niltepec.