La inseguridad pública tiene un costo económico “nada despreciable” para México. Alcanza 130 mil millones de pesos al año, cantidad que equivale a uno por ciento del producto interno bruto (PIB), según estimó este miércoles BBVA Bancomer, el principal consorcio financiero del país.
“Existe una percepción creciente de que la violencia puede estar suponiendo un freno al desempeño actual de la economía mexicana”, planteó el grupo financiero en un reporte publicado ayer. Hay una relación entre violencia y crecimiento económico, comentó Jorge Sicilia, economista en jefe para México y Estados Unidos de BBVA, en la presentación del informe Situación México. Consideró, sin embargo, que el flujo de inversión extranjera no se ha visto influido por el aumento de la inseguridad en algunas regiones del país.
El reporte establece que de 2006 a la fecha, el incremento de la inseguridad y la violencia provocada por los grupos del crimen organizado han restado un punto porcentual cada año al crecimiento de la economía mexicana.
En 2010, con un producto interno bruto estimado oficialmente en 13 billones 94 mil millones de pesos, un punto porcentual equivale a 130 mil 940 millones, a precios de este año. Comparativamente, en los cuatro años de esta administración, periodo que comprende el análisis del grupo financiero, la pérdida de 4 puntos del PIB por causas relacionadas con la violencia es equivalente al valor de la producción anual de todo el sector agropecuario.
A principios de octubre, Ernesto Cordero Arroyo, secretario de Hacienda y Crédito Público, declaró a la agencia Reuters que los problemas de inseguridad del país “seguramente” afectaban la toma de decisiones económicas en algunas zonas específicas del país. En esa ocasión, el funcionario no hizo público algún cálculo sobre el costo relacionado con violencia e inseguridad.
“Si no hubiera habido violencia, México pudo haber crecido un punto porcentual por arriba de las tasas reportadas en los últimos años”, comentó Sicilia durante el informe.
La violencia afecta al crecimiento de la economía mexicana porque aumenta los costos de producción, transacción y seguridad que enfrentan las empresas; reduce la acumulación de capital físico y humano, y deteriora el entorno institucional, apuntó el especialista de Bancomer.El documento destaca que un entorno de violencia eleva los costos de producción por el necesario aumento de las medidas de seguridad y los de transacción por el deterioro del entorno institucional. A la vez, el nivel de precios de equilibrio será mayor y el de actividad menor que en una situación sin violencia. Desde el punto de vista de la acumulación de factores productivos, de capital físico y humano, la violencia también impacta negativamente, por lo que reduce la capacidad de crecimiento de la economía en el mediano plazo.
Determinar el costo real de la violencia en la actividad productiva entraña dificultad, expresó Sicilia. Sin embargo, destacó que en las encuestas que cada mes realiza el Banco de México entre especialistas en economía del sector privado, la inseguridad pública es mencionada por 17 por ciento de los encuestados como el factor principal que inhibe el crecimiento de la economía.
“Parece razonable pensar que la inversión privada es la variable más directamente afectada por un entorno percibido como inseguro. Además, el costo financiero que han de pagar para abordar los proyectos de inversión también es una variable que se toma en consideración. Si además se incluye como variable explicativa la referida de la encuesta del Banco de México (…) resulta factible que la inversión privada en México se haya podido ver frenada por la violencia”, indica el reporte.
Aunque la inversión privada en la economía es la variable más afectada por la inseguridad pública, el reporte de BBVA Bancomer no encontró relación entre el aumento de la violencia y el comportamiento de los flujos de inversión extranjera directa al país.
Sicilia explicó que la evidencia encontrada indica que la inversión extranjera está determinada por factores del ciclo económico global. Entre los inversionistas, aseguró, se valora positivamente el combate al crimen organizado. El costo económico asociado a la violencia es mayor en el corto plazo y sería mayor en el tiempo si no se enfrenta, concluyó.
La Jornada