Diana Mendez
La Asamblea Nacional Representativa (ANR) de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) concluyó su sesión tras un extenso debate entre los contingentes participantes en el marco del paro indefinido que se mantiene a nivel nacional. La reunión fue recesada a las 6:06 horas de este jueves, luego de que se definieran acuerdos clave y una nueva etapa dentro de su plan de acción.
Entre los resolutivos más relevantes, la ANR reiteró su exigencia de reinstalar de forma inmediata una mesa de carácter resolutivo con la Presidenta de la República. Asimismo, se acordó realizar una sesión de balance del movimiento huelguístico una vez que cada contingente haya analizado su participación bajo los cinco ejes definidos por esta instancia.
La Coordinadora también definió fijar un posicionamiento político frente a la visita que integrantes del SNTE realizaron a instancias oficiales el pasado 5 de junio, señalando su repudio hacia el sindicalismo corporativo y a quienes consideran “charros” del magisterio. En ese sentido, enfatizaron que Alfonso Cepeda Salas, actual dirigente del SNTE y diputado plurinominal por Morena, representa la continuidad del sindicalismo corrupto que ha colaborado con diversos partidos políticos en detrimento del magisterio.
Como parte del fortalecimiento organizativo, se acordó elaborar un documento de agradecimiento a las organizaciones sociales que han respaldado la jornada nacional unitaria y convocar a una nueva etapa de reorganización de la lucha, la cual comenzará este sábado 7 de junio con una declaratoria y mitin político a las 9:00 a.m. Además, se contempla el desarrollo de un proyecto de brigadeo nacional con miras a las futuras acciones de protesta.
Dentro del plan de acción inmediato, se realizará una marcha este viernes 6 de junio que partirá del Ángel de la Independencia al Zócalo capitalino a las 11:00 a.m., reafirmando que las calles continúan siendo el espacio legítimo de lucha para la clase trabajadora.
La CNTE reitera que su movilización no cesará hasta lograr la abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007 y de la Reforma Educativa impulsada durante los gobiernos de Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador. Bajo la consigna de “movilización-negociación-movilización”, los docentes democráticos afirman que su lucha sigue viva y combativa frente al Estado y al capital.
