La Ciudad de México es la única metrópoli en Latinoamérica con una Ley de Salud Mental, normatividad que la coloca a la delantera en materia de salud pública, aseguró el subsecretario de Políticas Públicas, Alberto Esteva, luego de exponer que se trata de una Ley completa porque está dirigida a la población y no sólo a quienes padecen un trastorno mental.
Dijo que de acuerdo a los especialistas, en la mayoría de la documentación que aborda el tema, los trastornos mentales se refieren a psicosis, neurosis, angustia, esquizofrenia, la depresión, no a todo lo que implica la salud mental.
Por eso, el planteamiento del Gobierno de la Ciudad de México fue que en dicha Ley la salud mental se integre todo un bienestar, no sólo la parte de trastornos mentales, “no obstante, que en el caso de estos pacientes esta normatividad especifica cuáles deben internarse”.
Bajo esta perspectiva, el subsecretario Alberto Esteva, dijo que la Ley especifica las funciones que se deben realizar desde distintas instancias y no sólo desde la Secretaría de Salud, que si bien es esencial, no es la única, pues el tema implica por ejemplo, el entorno educativo, entre otros.
Añadió que la Ley de Salud Mental en el Distrito Federal plantea el conjunto de acciones que tienen que ver con promoción de salud y por ende de prevención de riesgos, diagnóstico oportuno y atención correcta.
Destacó que mientras la mencionada Ley establecida en la Ciudad de México incluye, lo que tiene que ver con el consentimiento informado, en el mundo no se habla de normatividades en materia de salud mental y los países que tienen alguna, son muy generales, por ejemplo, España.
La responsable del Programa de Salud Mental de la Secretaría de Salud del DF, María de la Soledad Escamilla Cejudo, afirmó que los indicadores de una persona con un estado mental que no es armónico son síntomas fisiológicos que no son reflejados en exámenes médicos, también la irritabilidad, es decir circunstancias en donde aparentemente el menor estímulo provoca una sobre reacción.
“No hay un área que no se vea involucrada con salud mental. Es una responsabilidad de todos, Cultura, Deporte; lo que sea es salud mental”, aseguró la responsable del Programa de Salud Mental de la Secretaría de Salud capitalina.
Recomendó reflexionar sobre lo que hace cada quien, cómo afecta un problema económico, la enfermedad de un pariente o una mala relación familiar. “Ser honestos para no cruzar esa línea de un trastorno mental”.
En tanto que para el caso de personas que sufren algún tipo de trastorno mental brindarles atención para lograr estados de equilibrio. “Es una Ley que ofrece estrategias, acciones de promoción, prevención y diagnóstico oportuno”, destacó.
María de la Soledad Escamilla sugirió reestructurar tiempos en las actividades que realiza durante el día cada persona y reconocer los límites de cada quien. Un comienzo es tener un desayuno correcto, es decir, otorgarle la importancia que merece la nutrición.
“Esto es, cubrir las necesidades básicas de la manera más saludable posible, que es alimentación y sueño reparador. El que uno vaya funcionando, no quiere decir que el organismo no está resintiendo”, enfatizó.