En el panorama de desocupación laboral en México, 66 por ciento lo conforman jóvenes con trabajos informales, que los convierte en el sector más pobre y vulnerable, reveló Juan Arancibia Córdova, del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM.
En el documento ‘El empleo, el ingreso y el actual gobierno’ publicado en el boletín mensual Momento Económico, el investigador detalló además que del total de desempleados, 71.2 por ciento cuenta con estudios completos de secundaria, educación media superior y superior.
En el país, una parte de la demanda de empleos se resolvió con la migración hacia Estados Unidos, pero la población restante ‘permanece en el limbo’, y podrían formar parte de los ‘ninis’ -que no estudian ni trabajan- o de la delincuencia organizada, aseveró.
Por otra parte, de la población entre 15 y 24 años que laboran en empresas formales 40 por ciento no tienen seguridad social ni prestaciones, por lo que el problema actual no sólo es el déficit de las plazas, sino también la calidad.
Muchas de las plazas no cumplen con las normas laborales y de seguridad social establecidas por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), apuntó el investigador en un comunicado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Indicó que de acuerdo con el Informe sobre Tendencias Mundiales del Empleo 2012 de la Organización Mundial del Trabajo (OIT) la tasa de desocupación juvenil es de 12.7 por ciento, el doble de la que se registra entre la población en general.
El experto recordó al respecto que para el año en curso se prevé una desaceleración del crecimiento de la economía y en la creación de empleos.
Notimex