Los sismos de 2017 fueron un detonante para que las personas hicieran conciencia sobre su seguridad y se capacitaran en materia de Protección Civil. Una de estas historias es la de José Antonio Ruiz Félix, trabajador de Ciudad Administrativa, que desde hace dos años se desempeña como jefe de brigada del Departamento de Seguridad y Gestión del Riesgo de la Secretaría de Administración.
“Cuando llegué a este complejo administrativo me encontraba en Recursos Humanos. Sin embargo, después del temblor del 19 de septiembre de 2017, la Secretaría de Administración abrió un departamento de Protección Civil, al cual decidí unirme con la intención de poner en práctica todos mis conocimientos y salvaguardar la vida de mis compañeros”, comentó.
Junto con su equipo, integrado por otras siete personas, mantiene guardias y se encargan de la seguridad en los edificios 5 y 6. “Todos los días llego a primera hora para abrir las puertas y salidas de emergencia. Coordino a mi equipo y apoyo en cualquier situación de peligro”, agregó, “tenemos una gran responsabilidad”.
Su pasión por prepararse en Protección Civil comenzó cuando se inscribió en un curso de Bomberos. Ahí, aprendió a reaccionar a siniestros y desde entonces ha mantenido una capacitación constante con el fin de reaccionar ante cualquier contingencia.
“A lo largo de este tiempo, me he preparado para tratar a una persona en estado de convulsión, ayudar a mujeres embarazadas e instruir sobre el triángulo de la vida”, continuó, “también conozco de primeros auxilios psicológicos para apoyar a personas en estado de crisis, tomé cursos de control de serpientes, así como cursos tácticos”.
Estos conocimientos también los aplica fuera del trabajo. En su casa implementó un plan familiar en caso de un temblor, para proteger a su papá, mamá y hermano. Asimismo, ha brindado auxilio en accidentes de carretera.
“Desafortunadamente me ha tocado ver diversos accidentes durante mis viajes en moto, pero gracias a mis capacitaciones, puedo actuar como primer respondiente en lo que llega un profesional. En estas situaciones, no muevo a la persona ni le quito el casco. Me presento como persona que sabe de primeros auxilios, llamó al 911 y después a un familiar si es necesario. Me mantengo en la línea hasta la llegada de la ambulancia”, explicó.
Entre sus mejores experiencias se encuentra el macrosimulacro de este año, encuentro donde estuvo presente la Guardia Nacional y Sedena.
“Estar en este entorno me hizo sentir felicidad, porque vinieron personas de otros lados y me benefició para ampliar mis conocimientos. Además, participé bajando a una persona del tercer piso en una camilla, para colocarla en la zona segura del estacionamiento y prepararla para su traslado”.
José Antonio deja claro que le apasiona su trabajo y que está listo para afrontar todo tipo de situación. Además, siempre emprende acciones para reforzar la cultura de Protección Civil, ya que en sus capacitaciones aprendió que Oaxaca es una zona sísmica.
Antes de despedirse, José Antonio mandó un mensaje muy importante a la ciudadanía y la base trabajadora del Gobierno del Estado: “Les digo a todas y todos que se interesen más en este tema, hagan conciencia, preocúpense por su salud y valoren su vida. Es necesario que más gente se capacite en primeros auxilios, así sabremos cómo actuar ante una emergencia y mantendremos espacios seguros”.