Hace unos días, un colega periodista me preguntó que a qué distancia se encuentra Putla, de Huajuapan de León, ya que tenía que ir a hacer un reportaje allí. No quería ir porque recordaba las palabras de Jorge Castañeda Gutman, quien en una ocasión llamó a ese municipio “pueblo arrabalero y horroroso”.
Cuando el exsecretario de Relaciones Exteriores de México calificó a Putla con esas palabras, se generó un verdadero escándalo en las redes sociales, especialmente en Tuiter. Esto ocurrió el 16 de junio de 2020, durante el programa de televisión “La Hora de Opinar”.
Putla se convirtió en una de las tendencias más populares en Twitter durante varios días, lo cual me llamó mucho la atención. Después supe que la defensa de ese lugar se debía a que años antes, Juan Ruiz Healy, un periodista de televisión, hizo un reportaje titulado algo así como “Putla, un lugar donde no se trabaja”. Efectivamente, hace años en Putla no se sembraba mango ni ningún otro fruto, ya que todo crecía de forma natural. Incluso cuando alguien iba de otro municipio o estado a comprar frutos, el dueño de los terrenos les decía: “Cosechen y me traen el dinero”. La gente se daba ese lujo. Ese programa de televisión quedó grabado en la mente de la gente y muchos pretendieron irse a vivir a ese maravilloso lugar.
Lo que el excanciller dijo en televisión le salió con un acento de odio, de mal agradecimiento, venganza y rencor hacia ese lugar de increíble belleza natural. Supongo que también lo hizo en nombre de su hija Javiera, quien al terminar su carrera de medicina en la UNAM, fue enviada a Putla de Guerrero para hacer su servicio social.
Más adelante, en ese mismo programa, el autor de más de una docena de libros aseguró que si enviaran a un cubano a vivir a Putla, estaría feliz de la vida. Con esto quiso decir que su hija está por encima de los oaxaqueños y los cubanos. Prácticamente dijo que su hija no merece pisar suelo mexicano ni cubano. Y lo peor es que días después, el entonces gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, quien por cierto nunca conoció la entidad que gobernaba, le mandó decir por Tuiter que lo invitaba a conocer Putla. Pobre exgobernador, ignorante de todo lo nuestro, no se dio cuenta o no quiso darse cuenta de que Castañeda desprecia todo lo oaxaqueño.
El racismo en nuestro país no es nuevo. Esta forma de discriminación se dirige contra aquellos que tienen un color de piel más oscuro, contra los indígenas, los afromexicanos y contra todos aquellos que parecen diferentes o inferiores. Es exactamente lo que ha pasado con el presidente municipal de Huajuapan, Luis “de los liones” Martínez Sánchez (liones porque le encantan los líos de faldas). Este presidente muestra su racismo abiertamente. Nunca ha permitido que un indígena o alguien mal vestido entre a su oficina. Cuando Marcelo Ebrard llegó a la presidencia municipal, no permitió que el presidente municipal de Cacaloxtepec le dirigiera unas palabras en mixteco al canciller, porque según Luis de los liones, no se siente indígena ni mixteco. ¡Fíjense nada más! y así quiere hermanarse con un pueblo de España.
Martínez Sánchez ve a todos desde la altura en la que él cree estar, y desde allí mira hacia abajo a aquellos que considera que no son como él. Si son curiosos, cuando lo vean caminar por la calle, cuando se encuentra con alguien que él considera que no está a su nivel, se pondrá a contar las telarañas de los techos. Puede que no lo crean, pero es cierto.
Ya no les conté de mi amigo periodista que quiere ir a Putla, me ganó la tripa, lo dejo para otro comentario.
