Joakim Soria estuvo en Academia Alfredo Harp

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El ligamayorista recordó sus inicios en la pelota mexicana, donde se forjó con los Diablos Rojos

San Bartolo Coyotepec, Oaxaca.- Joakim Soria aprovechó su visita a la Academia de Béisbol Alfredo Harp Helú para recordar sus inicios en la pelota y sobre todo mostrar su agradecimiento con los Diablos Rojos del México, que le permitieron desarrollarse como jugador profesional y dar el gran brinco a las Grandes Ligas.

En el inicio de su visita, Soria Ramos hizo un recorrido por la Academia para darse una idea de la que él mismo contempla instalar en su natal Coahuila por medio de su propia Fundación.

Sorprendido por las instalaciones que vio, el líder mexicano de salvamentos en la gran carpa comento “ya quisieran tener en República Dominicana las facilidades que aquí se brindan, no se compara lo que han hecho los equipos de Grandes Ligas allá”.

Luego del recorrido, Joakim estuvo acompañado del C.P. Alfredo Harp Helú, dueño y presidente de los Diablos Rojos y del Lic. Roberto Mansur, presidente ejecutivo de los Diablos Rojos, en una conferencia de prensa que sirvió para que los más de 40 jóvenes que actualmente toman el curso escucharan hablar al “Látigo de Coahuila”.

El primer mensaje del lanzador de Kansas City fue muy directo “no tienen excusa ni pretexto para no hacer las cosas y aprovechen estas instalaciones que les puso Don Alfredo”.

El también ganador del Premio Nacional de Deportes recordó sus inicios, cuando le tocó entrenar en Oaxaca después de una lesión que lo obligó a parar un año después de ser prospecto de los Dodgers de Los Ángeles, “me acuerdo bien que teníamos que caminar más de un kilómetro para conseguir la comida y aquí la tienen a dos pasos”.

Soria no dejó pasar la ocasión de expresarle su gratitud a Don Alfredo Harp por el impulso que recibió a principios de su carrera y dijo que fue él quien lo motivó a crear su Fundación “Estoy siguiendo los pasos de una persona tan grande como es Don Alfredo y tratar de imitar su ejemplo en mi comunidad”.

Joakim insistió en que representa un orgullo haber salido directamente a las Grandes Ligas desde la organización escarlata y recordó a Luis Fernando Méndez por los consejos que le dio cuando fue su coach de pitcheo e igualmente al sacerdote Valenzuela, quien en el dugout del Foro Sol le dio las claves para ser un ganador “para ser alguien triunfador en la vida se necesitan tres cosas: Corazón, mentalidad y ganas de hacer lo que te propones. Sí aplicas esos fundamentos en cualquier actividad vas a ser alguien en la vida”.

Sencillo como siempre, Soria continúo hablando de su paso por Liga Mexicana y su amor por los Diablos “constantemente estoy en comunicación con el licenciado Mansur preguntando cómo va el equipo, cómo van en Tepic y cómo va la Academia. Algo que aprendí en Diablos es que siempre lo serás, somos una gran familia, muchas personas quisieran estar en nuestro lugar, es un privilegio. Considero que el béisbol mexicano va en ascenso y uno de los factores es que los Diablos están haciendo bien las cosas, se les conoce y reconoce en Estados Unidos.”

Joakim Soria se tomo tiempo para escuchar preguntas de los prospectos y de un puñado de jovencitos que se dieron cita para conocer al ídolo y un momento muy emocionante fue cuando le cuestionaron quién ha sido su mayor motivación.

Su respuesta sorprendió a todos los asistentes, ya que lejos de mencionar el nombre de algún atleta, Joakim demostró la gran importancia que le da a la familia y dijo: “Siempre admiré mucho a mi hermano pero sobre todo a uno de mis tíos quien a pesar de sufrir una discapacidad en su trabajo en Altos Hornos de México nunca se dio por vencido. Él perdió ambos brazos y a pesar de ello aprendió a escribir con los pies y hoy en día es un destacado ingeniero en sistemas. Si nosotros estamos completos y ponemos pretextos qué le dejamos a quienes han tenido la mala fortuna de perder alguna parte de su cuerpo”.

Antes de tomarse fotos con todas personas que se lo solicitaron, Soria dijo que espera reportar al campo de entrenamiento el 2 de febrero.