Irán reiteró este miércoles su determinación a proseguir su programa nuclear pese al último informe de la AIEA que lo acusa de querer dotarse del arma atómica y un general iraní amenazó con destruir Israel si el Estado hebreo ataca las instalaciones nucleares de la República Islámica.
“No retrocederemos ni un ápice en nuestro camino” declaró el presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad. Irán “no necesita bomba atómica”, dijo, en un discurso transmitido por televisión.
En un informe divulgado el martes, la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) expresó “serias inquietudes” por el programa nuclear de Irán, debido a información “creíble” que señala que este país intentó desarrollar el arma atómica.
Mientras Israel debate la posibilidad de emprender un ataque militar contra Irán, “la Agencia tiene serias inquietudes sobre una posible dimensión militar del programa nuclear iraní”, escribe la AIEA.
Los países occidentales reaccionaron de inmediato al subrayar que el informe confirma sus acusaciones y reclamaron más sanciones contra Teherán. El objetivo es alejar con ello la amenaza de un bombardeo militar preventivo de Israel.
En este contexto, el subjefe de estado mayor de las Fuerzas Armadas iraníes, el general Masud Jazayeri, amenazó este miércoles con destruir Israel si el Estado hebreo ataca las instalaciones nucleares de la República Islámica.
“El centro (nuclear israelí) de Dimona es el sitio más accesible al cual podemos apuntar y tenemos capacidades aún más importantes. Ante la menor acción de Israel, veremos su destrucción”, dijo el general Jazayeri.
Teherán asegura que su programa nuclear tiene carácter puramente civil y rechazó la acusaciones “infundadas” de la AIEA, basadas en falsos documentos “fabricados por los servicios de inteligencia estadounidenses y occidentales”, dijeron varios responsables iraníes.
La AIEA “sacrificó su reputación al hacer suyas las ineptas afirmaciones de Estados Unidos”, dijo este miércoles Ahmadinejad.
El representante iraní en la AIEA Ali Asghar Soltanieh acusó al director general del organismo, Yukiya Amano, de haber actuado de forma “parcial, política y no profesional” al avalar la publicación de las “falsas acusaciones de un pequeño número de países, incluyendo Estados Unidos”.
“Teherán no dejará sin respuesta este error histórico” del jefe de la AIEA, advirtió el representante iraní.
Ahmadinejad, por su lado, insistió que el país “no necesita bomba atómica”. “El pueblo iraní es inteligente, no va a construir dos bombas frente a las 20.000 que ustedes poseen”, dijo, dirigiéndose a los occidentales.
Ahora, la pelota está en el campo de los gobernadores de la AIEA, que se reúnen los 17 y 18 de noviembre en la capital austríaca, sede de la institución.
Sus 35 países miembros deberán decidir si, según los elementos presentados por Amano, deciden acudir al Consejo de Seguridad de la ONU para nuevas sanciones contra la República Islámica.
Irán ya es objeto de seis resoluciones de la ONU, de ellas cuatro incluyendo sanciones por su programa nuclear, en especial sus actividades de enriquecimiento de uranio.
La AIEA, que lleva investigando ocho años sobre Irán, presentó su informe “más completo y detallado” sobre el programa nuclear de este país, subraya en una nota el ISIS, un “think thank” estadounidense de cuestiones nucleares. “Sin embargo, la AIEA no dice si Irán es capaz de fabricar un artefacto nuclear explosivo”, precisa.
La AIEA “no sugiere en absoluto que Irán esté a punto de dotarse del arma nuclear”, coincide Peter Crail, experto en la Asociación de control de armas en Washington. Para él, “es improbable” por ello que China y Rusia se dejen convencer para aprobar nuevas sanciones contra Irán.
EFE