Los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), invitan a las madres y padres de familia para que lleven a sus hijas e hijos de seis a 59 meses de edad, así como al personal de salud y a las personas mayores de 60 años, mujeres embarazadas, o quienes tengan alguna enfermedad como: diabetes, hipertensión arterial y VIH/Sida, para que acudan a vacunarse contra la influenza estacional.
La institución informó que, para tal fin, se disponen de mil 231 puestos de vacunación ubicados en lugares estratégicos y unidades médicas de diferentes instituciones que conforman el sector Salud en las seis Jurisdicciones Sanitarias en el estado.
Señaló que la influenza es una enfermedad viral que afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y, ocasionalmente, los pulmones.
La infección dura generalmente una semana y se caracteriza por la aparición súbita de fiebre alta con escalofríos, cefalea, malestar general importante, tos seca, dolor de garganta, rinitis, mucosidad nasal o nariz tapada, dolores musculares y corporales, también de cabeza, fatiga (cansancio), y algunas personas pueden tener vómitos y diarrea.
La dependencia precisó que al corte de la semana epidemiológica número 42, se han registrado en Oaxaca, cinco casos positivos de influenza, de los cuales, cuatro corresponden a la Jurisdicción Sanitaria número uno “Valles Centrales” y uno a la Jurisdicción Sanitaria cuatro “Costa”, sin presentarse hasta el momento alguna defunción.
Hasta el momento se han aplicado en las unidades médicas de los SSO, 93 mil 344 dosis del biológico, no obstante, la institución reitera la invitación a las familias oaxaqueñas, especialmente a los grupos prioritarios a que acudan a aplicarse la vacuna anti-influenza, con la finalidad de estar protegidos para la temporada invernal que se avecina.
Asimismo, exhortaron a la población a continuar con las medidas de higiene como son: el lavado de manos correcto, adecuado y frecuente, evitar el contacto directo con las personas que estén enfermas; además de evitar tocarse la nariz, boca y los ojos.
Así como practicar otros buenos hábitos de salud como limpiar y desinfectar las superficies de contacto más comunes en el hogar, en el trabajo o en la escuela, especialmente cuando alguien está enfermo. También dormir bien, mantenerse activo físicamente, controlar el estrés, beber mucho líquido y comer alimentos nutritivos.