El ex secretario general de la Cofepris, Rafael Fernández de Lara, es investigado por adjudicar de manera directa una obra de casi 100 millones de pesos y permitir diversas irregularidades en su ejecución.
De acuerdo con la Secretaría de la Función Pública (SFP), en abril de 2012 el ex funcionario entregó un contrato de 66 millones de pesos a la constructora Diproca.
Después de seis meses, el convenio, suscrito para “adecuaciones urgentes” al edificio de la Comisión Federal para Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), en la colonia Nápoles, tuvo una ampliación de 30 millones de pesos.
Sin embargo, según la SFP, Fernández adjudicó la obra sin autorización presupuestal de la Secretaría de Salud, sin que estuviera prevista en el programa anual, sin tener planos y sin verificar la situación fiscal de Diproca.
“Usted firmó el convenio adicional 084-12-A el 3 de octubre de 2012, por un importe de 30.4 millones de pesos más IVA, equivalente al 46 por ciento del monto originalmente contratado, sin contar con la disponibilidad presupuestaria para cubrir la obligación de pago”, indica el citatorio girado al ex funcionario para comparecer el 22 de abril ante la SFP.
“El catálogo del convenio adicional está integrado por 610 conceptos de obra no previstos en el catálogo original”, agrega.
Como resultado de problemas durante la ejecución de la obra, la SFP imputa a Fernández daño patrimonial de 19.2 millones de pesos, y busca sancionarlo mediante un procedimiento administrativo de responsabilidad.
Dichos daños derivan de pagos de obra no ejecutada, un deficiente análisis de precios unitarios, costos indirectos pagados y no aplicados, y cargo indebido de compras de mobiliario al contrato de obra pública, entre otros.
Fernández de Lara ocupó el cargo en la Cofepris de noviembre de 2011 a marzo de 2013, todo el tiempo bajo la gestión del actual titular del organismo, Mikel Arriola.
Oficinas de la Cofepris que fueron remodeladas en 2012 por la empresa Diproca.
Reforma.com
