Ante la grave situación en que se encuentra el sector cafetalero, del que dependen cientos de miles de familias de escasos recursos, el senador oaxaqueño Benjamín Robles Montoya se sumó a la exigencia de los productores del aromático para que el Gobierno Federal destine recursos emergentes que les permita continuar con el cultivo del grano.
“Los compañeros productores de café nos han pedido nuestra interlocución para que puedan hacer sus planteamientos directamente ante los secretarios de Hacienda y Sagarpa, y ya lo estamos haciendo a través de la coordinación del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado. Indistintamente de la filiación política que pudieran tener las organizaciones hemos intervenido porque es un asunto de alta prioridad que afecta a cientos de miles de familias cuyo único ingreso es la producción y cosecha del café”, expuso Robles Montoya.
De acuerdo con las organizaciones de cafeticultores a nivel nacional la producción anual de café cayó de 6 millones a 4 millones de sacos en 2013, lo que representa una afectación directa a los más de 300 mil productores del sector, por lo que exigen al Gobierno Federal un fondo emergente por mil 800 millones de pesos que permita rescatar las 600 mil hectáreas de cultivo y subsidio para la comercialización del café.
Refirieron que el Gobierno Federal ya intervino con los cañeros, a quienes destinó mil 500 millones de pesos para atender las 180 mil hectáreas que tienen a nivel nacional.
“Hemos decido intervenir de manera inmediata para evitar que nuestros productores del campo tengan otra vez la necesidad de movilizarse para ser escuchados, como ha pasado con los cañeros, lecheros, ganaderos y otros hombres del campo que se ha visto en la necesidad de llegar a la protesta popular para ser recibidos, vamos a exigir sensibilidad y cordura al Gobierno Federal para que atienda esta grave problemática”, asentó el legislador federal.
Para el representante popular del estado de Oaxaca es urgente la atención eficaz de las dependencias federales involucradas en este problema, ante el riesgo, ya advertido por los propios productores, de que quienes dependen de la producción del café decidan irse al cultivo de productos ilícitos, lo cual agravaría la grave situación de inseguridad y violencia que afecta al país.
“Estamos a tiempo de atender este problema antes de que se vuelva un conflicto social, la política de atención al campo tiene que cambiar, tenemos que poner mucha atención a lo que pasa en el campo mexicano, que lamentablemente se encuentra en el abandono por la falta de rentabilidad, por lo que reitero mi llamado al Gobierno de la República para la firma de un pacto por el campo”, puntualizó el senador Benjamín Robles.