En 15 casos concretos, diputados federales y senadores violan la Constitución y disposiciones legales al incumplir plazos específicos para emitir normas o hacer nombramientos.
Así lo advierte el llamado Violómetro Constitucional, resultado de una investigación auspiciada por la fundación Omidyar Network y realizada por la Maestría en Periodismo y Asuntos Públicos del CIDE para medir las violaciones constitucionales del Congreso.
Estas obligaciones derivan de artículos transitorios o la Constitución en los que se fijan plazos para que los legisladores adecuen leyes o emitan otras.
Según el estudio, entre los casos más graves se encuentra la regulación de la propaganda gubernamental, que debió haberse emitido desde hace 7 años con 5 meses.
En tanto, la ley reglamentaria del Artículo 33 constitucional, que versa sobre la expulsión de extranjeros, debió aprobarse hace 2 años y 10 meses, y la Ley General de Aguas, hace 2 años y 2 meses.
El nombramiento del contralor interno del Instituto Federal de Telecomunicaciones tiene un retraso de un año y 9 meses.
También están documentados otros 29 casos en los que diputados y senadores violaron los plazos para emitir nuevas regulaciones o hacer nombramientos de funcionarios.
La designación a tiempo de los consejeros electorales del entonces IFE dejó de cumplirse en 4 ocasiones.
Los momentos más criticados son en el 2010, cuando los diputados se tardaron un año y un mes para hacer el nombramiento; y en el 2013, cuando se dejaron pasar 13 meses antes del nombramiento de los actuales consejeros del Instituto Nacional Electoral.
Roberto Duque, impulsor del Violómetro, expuso que se ha perdido la vergüenza por la forma en que se incumplen los plazos en que se debe aprobar una nueva ley, hacer alguna reforma y avalar un nombramiento.
Duque advirtió que no es bueno para el País que quienes hacen las leyes no las respeten, y que además haya impunidad ante tal falta.
“No hay nada peor para el Estado de Derecho, para la cultura de la legalidad, que el legislador incumpla la legislación, y más si es la Constitución”, expresó.
El académico empezó a considerar el tema desde que era estudiante y ya como abogado le pareció inaceptable que se echara a andar el “reloj legislativo”, en los años en que el Presupuesto no se aprobaba a tiempo el 31 de diciembre por falta de acuerdos.
“Siempre me caló este tema, de cuando el Presupuesto de Egresos no era aprobado en tiempo y me decía, ‘¿cómo es posible que incumplan la Constitución de manera directa, descarada?'”.
Agregó que de ahí surgió la idea de un verdadero reloj legislativo en internet, visto como un mecanismo que registre en tiempo real las violaciones constitucionales.
Duque dijo que impulsó la idea de un cronómetro que registre los casos de violaciones constitucionales, porque es inaceptable que esto siga sucediendo en el Congreso.
“Creemos que una de las razones por las que los legisladores violan continuamente la Constitución, al no cumplir los plazos que ellos mismos han impuesto, es porque nadie le da seguimiento ni hay registro de cuánto tiempo llevan así.
“Queremos exponer estas violaciones de manera ordenada. ¿Qué consecuencias habrá? Nuestro anhelo es que en algo ayude a la cultura del Estado de Derecho y legalidad”, dijo el investigador.
Detalló que no se trata de un proyecto académico, sino de un instrumento ciudadano que tendrá impacto en que los legisladores cumplan con su responsabilidad.
“A veces, hay que exhibir a los legisladores para que reaccionen un poco más que antes”.
Reforma.com
