Unas 96 personas fallecidas, 78 iglesias afectadas, 243 escuelas dañadas, 12 mil viviendas destruidas y 800 mil damnificados es el saldo preliminar hasta el último corte que ha realizado el Gobierno del Estado tras el terremoto de 8.2 grados en la escala de Richter con epicentro en Pijijiapan Chiapas.
De acuerdo con las autoridades una de cada tres viviendas ha quedado inhabitable, esto al asegurar que el apoyo si se entrega y que si llega a los más afectados.
Sin embargo, familias enteras en Unión Hidalgo, Ixtaltepec, San Mateo del Mar; en el Mixe Bajo en San José El Paraíso entre otras el apoyo a fluido a medias, según las denuncias de los habitantes.
El gobierno de Oaxaca reconoció que la región del Istmo de Tehuantepec se encuentra en emergencia toda vez que las víctimas mortales han pasado de 71 a 96 de manera preliminar además de que han sido detectados cuatro municipios más con daños totales al igual que Juchitán de Zaragoza.
Unión Hidalgo, Ixtaltepec, Santiago Astata y Juchitán son las poblaciones que han sido consideradas entre la Zona Cero. En estas localidades la mayoría de las viviendas colapsaron; los servicios de agua, luz y telefonía dejaron de funcionar.
De acuerdo con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la energía eléctrica en el 90 por ciento de los 41 municipios afectados se restablecería este mismo domingo. La Comisión Nacional del Agua (Conagua), se comprometió a trabajar para dotar del líquido y drenaje a ese mismo porcentaje de poblaciones.
Además, Petróleos Mexicanos (Pemex), restablecería el suministro de gasolinas y las corporaciones policíacas, Gendarmería y demás han aplicado acciones de seguridad en las tiendas de abarrotes para que los pobladores afectados acudan a realizar sus compras.
El gobernador del Estado Alejandro Murat Hinojosa reconoció que a casi cuatro días del terremoto no se ha inspeccionado la mayoría de municipios que conforman la región, pero que se han detectado cuatro más en estado de emergencia.
En cada uno de los 41 dijo se instalaron los albergues, ahí las Fuerzas Armadas de México y Cruz Roja Mexicana distribuyen las despensas, por lo que descartó que éstas se politicen.
Carina García