Después de revelarse que el gobierno de Enrique Peña buscaba firmar un compromiso por 20 millones de dólares bajo el cual México aceptaría una cuota de deportación de migrantes indocumentados no mexicanos, y un número de solicitantes de asilo que buscan refugiarse en Estados Unidos, Amnistía Internacional consideró “inadmisible” dicho acuerdo.
“Sería completamente inadmisible que un país con los recursos que tiene los Estados Unidos transfiera sus obligaciones internacionales para proteger vidas humanas y creara un muro de inhumanidad junto con México”, afirmó Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional, en un boletín difundido por el organismo.
De acuerdo con Guevara Rosas, tal acción sería un “trato arriesgado que no debe permitirse”.
En medio de la presión del equipo del presidente electo Andrés Manuel López Obrador, el gobierno de Peña Nieto rechazó 20 millones de dólares asignados en la Iniciativa Mérida por la administración de Donald Trump, para la repatriación de inmigrantes indocumentados en México.
Sin embargo, la directora de AI alertó respecto a que “una vez aprobada la Iniciativa Mérida, no hay garantía que los fondos asignados para deportaciones no sean usados, y estas promesas verbales necesitan ser acompañadas de acciones concretas”.
La misma organización destaca que seria la primera vez que parte de los fondos de Iniciativa Mérida serían utilizados para deportaciones.
“En lugar de enfocarse en una cooperación internacional que atiende a la crisis de derechos humanos en la región, México y los Estados Unidos continúan discutiendo maneras de aumentar las detenciones y deportaciones de familias y personas que huyen de países azotados por la violencia como El Salvador, Nicaragua, Venezuela y Honduras, sin mencionar a personas refugiadas de otros países del mundo”, refiere Guevara.
Amnistía Internacional pidió a México honrar su tradición como país de migrantes y dejar de incumplir sus obligaciones en la materia.
Fuente: proceso.com