La Presidenta de Argentina, Cristina Fernández, impulsó con recursos del Estado la campaña de su hijo Máximo Kirchner, quien se postuló como candidato a diputado nacional.
La Mandataria aprovechó el uso de la cadena nacional, a la que tiene derecho, para encabezar un acto en la patagónica provincia de Santa Cruz, donde además su cuñada y Ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, se candidateó para Gobernadora.
El motivo oficial del viaje de la Presidenta fue la inauguración de obras en materia de salud, pero su discurso apeló a la campaña electoral que se vive en el país a poco más de tres meses de los comicios generales del próximo 25 de octubre.
Fernández defendió la utilización de la cadena nacional que interrumpe la programación habitual de radio y televisión, ya que, dijo, de esta manera se comunica de manera directa con los ciudadanos.
“Esta comunicación con la sociedad es para que se sepa todo lo que se hace y se entere, estas políticas son para que se empodere”, afirmó durante un largo discurso y mientras las cámaras de la televisión oficial enfocaban de vez en cuando a su hijo Máximo, sentado en primera fila.
El heredero de la dinastía Kirchner se postuló por primera vez a sus 38 años a un cargo de elección popular, pero ya tiene garantizado su arribo a la Cámara de Diputados porque representará a la provincia de Santa Cruz, que es el bastión político de sus padres desde hace 25 años.
El uso de la cadena nacional es frecuentemente denunciado por la Oposición, ya que considera que Fernández de Kirchner abusa de un recurso que debería ser extraordinario, para hacer campaña por sus candidatos.
La frontera entre los actos de Gobierno y los actos partidistas es muy difusa para la Presidenta, ya que en las últimas semanas suele utilizar sus discursos para apoyar, por ejemplo, al Gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, a quien eligió como candidato presidencial de su partido Frente para la Victoria.
En el evento de este jueves también estuvieron el candidato a la vicepresidencia, Carlos Zanini, y el Ministro de Economía, Axel Kicillof, quien se postuló a una diputación.
La ley electoral argentina permite que los funcionarios públicos se mantengan en sus puestos aunque se postulen a algún cargo de elección popular, lo que impide discernir, investigar y sancionar la utilización de recursos públicos en sus campañas.
También en tono electoral, la Presidenta advirtió que ahora hasta la Oposición les da la razón, al referirse al brusco viraje de su rival político, el jefe de Gobierno y candidato presidencial, Mauricio Macri, quien asumió que, en caso de ganar, mantendrá varias de las políticas kirchneristas que siempre criticó.
